La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó que esta mañana el Papa Francisco «ha vuelto a utilizar nasales de oxígeno de alto flujo» y su situación continúa siendo crítica.

Desde el Vaticano se precisó que se realizaron «más exámenes clínicos» y que «se esperan los resultados en el boletín de esta tarde». Anteriormente, se había informado que el para Santo Padre «la noche transcurrió tranquila» y que «descansó».

A los 88 años, el Papa se encuentra internado desde el 14 de febrero pasado, y hoy envió un emotivo mensaje a los miles de fieles de todo el mundo que siguen con enorme ansiedad su evolución.

“Continuo con confianza mi hospitalización en el policlínico Gemelli, siguiendo con los tratamientos necesarios: ¡y el descanso también forma parte de la terapia!”, escribió. “Agradezco de corazón a los médicos y al personal sanitario de este hospital por la atención que me están demostrando y por la dedicación con la que realizan su servicio entre las personas enfermas”, añadió. Nuevamente dio las gracias por los mensajes de cercanía recibidos desde todo el mundo y pidió que rezaran por él.

En el texto enviado, difundido por el Vaticano al mediodía local -la misma hora exacta en la que normalmente el Pontífice se asoma de la ventana de su despacho del Palacio Apostólico para recitar la oración ante miles de fieles-, confirmó que en los últimos nueve días de internación, cuando los partes hablaban de que durante la jornada había realizado “actividades de trabajo”, era verdad. Fuentes vaticanas dijeron que lo había escrito hace “unos días”. Así como el hecho de que, más allá de la situación delicada y de las complicaciones aparecidas el sábado -cuando tuvo una crisis respiratoria severa y, además, debido a falta de plaquetas y anemias, transfusiones de sangre-, sigue alerta e informado -lee todos los días algunos diarios- y preocupado por la situación del mundo.

“Mañana se cumple el tercer aniversario de la guerra a gran escala contra Ucrania: ¡un acontecimiento doloroso y vergonzoso para toda la humanidad!”, denunció.

Como todos los domingos, renovó su cercanía al “martirizado pueblo ucraniano”, e invitó a los fieles de todo el mundo a recordar a las víctimas de todos los conflictos armados. Además, llamó a rezar “por el don de la paz en Palestina, en Israel y en todo Oriento Medio, en Myanmar, en Kivu y en Sudán”.