El turismo religioso congrega a más de 300 millones de personas al año a nivel mundial, con una relevancia social importante en cuanto a la generación de puestos de trabajo y el desarrollo de las economías regionales, se destacó durante la apertura del Congreso Internacional de Santuarios y Turismo Religioso que se desarrolló en la localidad de Termas de Río Hondo, en Santiago del Estero.
Ante la presencia de destacados especialistas nacionales e internacionales que se dieron cita en el Centro Cultural San Martín, ubicado en el Parque Martín Miguel de Güemes, el secretario de Turismo de la Nación, Alejandro Lastra y el vicegobernador santiagueño, José Emilio Neder, presidieron ayer el acto de apertura en esta localidad ubicada a 78 kilómetros al norte de la capital santiagueña.
El congreso tuvo como objetivo principal conocer la organización y operatoria institucional de los principales santuarios que reciben peregrinos y visitantes todos los días del año, sus posibilidades de adaptación a las convocatorias populares y masivas y a los requerimientos de la actividad turística mundial.
Lastra precisó que el turismo religioso «es una de las disciplinas que más ha crecido en los últimos 20 años y por eso es importante trabajar entre el sector público y privado».
«Santiago del Estero es ejemplo en la recuperación económica y felicito a las autoridades provinciales por generar festejos culturales, deportivos y actividades empresariales, al que ahora suma el turismo religioso», añadió.
Asimismo, el funcionario nacional indicó que «Santiago del Estero es una de las provincias que se ha sumado a la revolución de los aviones que une destinos y fomenta el turismo».
Por su parte, el titular de la Comisión Argentina de Turismo Religioso, Hernán Gómez, destacó que el turismo religioso «es un fenómeno significativo para nuestra época, que genera empleo e inclusión social con la participación del sector público y privado”.
«Argentina es un país bendecido porque nos permite convivir con distintos credos en paz y en armonía, en el que el turismo religioso acerca a las personas a tener una experiencia religiosa con Dios», agregó.
También estuvieron presentes el titular de la Cámara Argentina de Turismo (CAT), Oscar Ghezzi, y el obispo de la Diócesis de Santiago del Estero, monseñor Vicente Bokalic.
A su turno, el prelado se refirió a la beata María Antonia de Paz y Figueroa, «Mama Antula», e indicó que en su imagen «hemos descubierto a una mujer apóstol que se ha destacado por servir al prójimo, a los más débiles, que supo asumir un desafío en tiempos muy difíciles”.