El jefe de asesores del Ministerio de Salud bonaerense, Enio García, aseveró hoy que «con este número alto de casos» de coronavirus «no es posible resistir mucho tiempo más», y advirtió que «estamos al límite con el tema de camas y traslados».
«La gente tiene que entender que también estamos con una demanda de oxígeno altísima», expuso el funcionario en declaraciones formuladas esta mañana a radio El Destape y destacó que además hace falta bajar los contagios «porque los trabajadores de los hospitales están cansados».
García explicó que si «los casos se estabilizaron», contó que se venía registrando «un crecimiento muy fuerte», pero remarcó que «nunca se había visto esta aceleración en la primera ola».
«En la provincia, llegamos las últimas semanas a 15 mil casos, siendo que el pico máximo del año pasado fueron 6.500. Se estabilizó en valores altos. Estamos en promedio de 12 mil casos por día. Ahora quizá bajamos un poquito, pero sigue siendo un número muy alto», enfatizó.
Analizó luego que las medidas que adoptó el presidente Alberto Fernández para restringir la circulación y minimizar los contagios, «tuvieron un efecto importante» y expresó que «los casos dejaron de crecer», pero insistió que los contagios «están estacionados en un número tan alto, que el sistema de salud está saturado».
El jefe de asesores planteó que se registra un 80% de ocupación de camas en el Gran Buenos Aires y un 60% en el interior y señaló que, por ese motivo, «muchos intendentes de distritos que no son del AMBA piden pasar a fase 2, con las restricciones que hay allí».
Destacó que en la primera ola «hubo un pico primero en el conurbano, luego bajó y comenzó en el interior, con lo cual se pudo manejar la situación» pero subrayó que «ahora se están acoplando ambas curvas, lo cual dificulta el trabajo».
Sostuvo que, para descomprimir el sistema sanitario, habría que bajar «a 6.000 u 8.000 casos, que sigue siendo un número importante» y estimó que, en ese punto, «se podrá ir abriendo o cerrando (actividades)».
El médico sanitarista se mostró preocupado «porque gente de entre 30 y 50 años está ingresando a terapia intensiva», pero destacó que la campaña de vacunación avanza en la provincia de Buenos Aires.
Consultado sobre qué ocurrirá con las personas que esperan la segunda dosis de la vacuna Covishield, debido a que la India dejó de exportarla, el funcionario respondió: «la Covishield es como si fuera el genérico de AstraZeneca, es la misma composición, pero producida en otro laboratorio».
«Nosotros tenemos convenio con AstraZeneca. Hay un retraso con la vacuna que empezamos a producir acá y mandamos a México. Entiendo que México está buscando una solución a través de Estados Unidos, que está más flexible con el tema de los insumos. Entendemos que en poco tiempo vamos a tener esa vacuna acá, con la cual podremos dar la segunda dosis porque es la misma tecnología», dijo.