La Dirección General de Cultura y Educación bonaerense facultó hoy a los directivos de todas las escuelas de la provincia de Buenos Aires a disponer la dotación de docentes que deben concurrir a los establecimientos durante la cuarentena dispuesta a nivel nacional ante la pandemia de Coronavirus.
Se trata de una medida que era reclamada por los gremios docentes bonaerenses, que impugnaron la obligatoriedad de asistencia para la totalidad del personal escolar.
Así lo resolvió la cartera educativa provincial que además, en coincidencia con lo dispuesto por el gobierno bonaerense, dispuso que desde hoy, las trabajadoras de la educación embarazadas y la población considerada de riesgo queden habilitadas para trabajar desde sus hogares.
También podrán hacerlo quienes tengan a su cargo niños y niñas en edad escolar, hasta el 31 de marzo, consignaron fuentes oficiales.
Según un comunicado de la dirección provincial, a cargo de Agustina Vila, esta nueva reglamentación que «garantiza la continuidad pedagógica, el servicio alimentario y la limpieza», se inscribe en la normativa dictada anoche por el gobierno provincial para prevenir la proliferación del Coronavirus.
«Las y los trabajadores del sector público, considerados población de riesgo, y las embarazadas, quedan facultados a no asistir a sus lugares de trabajo, quedando habilitados a llevar a cabo las tareas asignadas desde sus hogares, sin afectar la percepción de las remuneraciones», indicaron las autoridades por medio de una comunicación oficial.
En la resolución ministerial, la DGCYE faculta a los equipos directivos de las escuelas, en conformidad con los inspectores, a adecuar «el tamaño y los perfiles de la dotación del personal docente y auxiliar», procurando «la reducción de la circulación en la vía pública», pero con el fin de garantizar: la plena implementación del programa de continuidad pedagógica, la prestación del servicio alimentario, la limpieza profunda y desinfección en los establecimientos, la continuidad o inicio de las refacciones edilicias y las actividades administrativas propias de cada escuela.
Esta medida era reclamada por los dos gremios docentes mayoritarios, como son el Suteba y la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), quienes ayer impugnaron la obligatoriedad impuesta a todo el personal docente y no docente de concurrir a las escuelas durante esta cuarentena por considerar que contradecía el objetivo de reducir la circulación posible del virus de Coronavirus.