El presidente Alberto Fernández realizó esta noche una sorpresiva cadena nacional en la que, si bien no anunció medidas concretas, desaconsejó la salida del país y pidió extremar los cuidados ante la llegada de la segunda ola del coronavirus, de la que advirtió que en otros países produjo “niveles de contagios y fallecimientos muy elevados”.
Sin previo aviso, el mandatario realizó una intervención de unos 10 minutos en los que repasó la gestión de la emergencia sanitaria ante la llegada del coronavirus, habló sobre la demora en la entrega de vacunas y alertó sobre la llegada de la segunda ola. También reconoció las “consecuencias económicas y sociales” de la cuarentena, pero buscó alejar los rumores de un nuevo cierre masivo al indicar que “el mundo va a tener que convivir con la pandemia. También nosotros”.
A un año de la declaración de la primera cuarententa -que se cumplirá este viernes-, Fernández reflexionó que “la primera vez que les hablé de la pandemia les dije que mi prioridad era cuidar la salud de los argentinos y las argentinas. Algunos creyeron que las medidas que impulsaba eran exageradas, pero la experiencia demostró que era necesario ganar tiempo para evitar que se sature el sistema de salud”.
El Presidente se reunió esta tarde con gobernadores para analizar la situación ante la inminente llegada de la segunda ola de coronavirus al país, y si bien allí no se resolvieron medidas concretas, se acordó reforzar un mensaje para desalentar los viajes de argentinos al exterior y pedir mayores cuidados.
En esa línea, durante la Cadena Nacional Fernández indicó que “las nuevas variantes del virus hacen riesgoso viajar. Está totalmente desaconsejado viajar al exterior. Quienes lo hagan, al regresar deberán aislarse y tener cuidados estrictos”. Además, recordó que “las fronteras continuarán cerradas para turistas extranjeros, como lo están desde el 24 de diciembre”.
En tanto, dijo que “ahora que llega el otoño tenemos que reforzar esos cuidados. Cuanto más lo hagamos, habrá menos contagios y fallecidos. Donde no hay cuidado colectivo, cualquier sistema de salud puede desbordar”.
El mandatario nacional indicó que “para afrontar el otoño y el invierno tenemos un plan que incluye dos dimensiones: vacunación y cuidados. Para prevenir y reducir todo lo posible el impacto de la segunda ola, les pido que todos y todas respetemos las principales medidas de prevención”.
En ese marco, advirtió que “la pandemia no terminó” y que por ello “debemos extremar los recaudos para que el Covid no nos vuelva a aislar”.
Pero reconoció “las consecuencias económicas y sociales” que trajo la cuarentena: “Todas nuestras actividades se han visto afectadas. Tengo muy presente el esfuerzo que todo esto genera. Sé que en algún momento muchos sentimos cansancio de las limitaciones y hartazgo de la pandemia, dijo.
No obstante, indicó que “el mundo va a tener que convivir con la pandemia. También nosotros”. “Aprendimos a producir con Covid. Aprendimos a educar con cuidados. Aprendimos a cumplir los protocolos en todo tipo de establecimientos. Aprendimos a cuidarnos en actividades deportivas, culturales y encuentros familiares”, enumeró.
Faltante de vacunas
Sobre las vacunas, Fernández dijo que su aplicación “no está resultando todo tal como esperábamos” a causa de la “dilación global en la producción de vacunas”.
“En el desierto global de vacunas, nosotros ponemos toda nuestra energía, la capacidad financiera del Estado y su logística en comprar nuevas dosis. Organizamos que sean trasladadas y distribuidas a cada cuidad, a cada barrio, a cada pueblo, a los lugares más remotos del país. Mi objetivo es que la vacuna llegue lo antes que sea posible a cada uno y a cada una”.
En ese marco, evaluó que “hay tres problemas muy importantes. El primero es que en muchos países con la llegada del otoño, o incluso antes, se inició una segunda ola; el segundo problema es que el Covid ha tenido mutaciones y nuevas variantes; y el tercer problema es que hay escasez global de vacunas”.