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Un pabellón literario fue inaugurado hoy en la Unidad 18 Gorina, dependiente del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), como parte de las actividades culturales y artísticas que se desarrollan en las cárceles en el contexto de la crisis sanitaria por el coronavirus.
En el nuevo espacio se dictarán cursos de producción literaria, lectura reflexiva, producción audiovisual, cine debate, gramática y ortografía, y alfabetización, según se indicó en un comunicado.
El lugar contará con dos bibliotecas: la denominada Alfonsina Storni, que será fija y tendrá 500 libros; y la Leopoldo Lugones, que recorrerá las celdas y contará con 200 ejemplares.
En una transmisión online, las personas privadas de libertad presentaron el lugar que acondicionaron para la cultura, inspirados en escritores y músicos de la Argentina, al que denominaron “Unidos en Revolución Literaria”.
En la ceremonia, los internos explicaron el nombre que eligieron para cada celda motivados por artistas como Carlos Alberto Solari, Jorge Luis Borges, Gustavo Cerati, Luis Alberto Spinetta, León Gieco, Mariano Moreno, José Hernández y Alfonsina Storni.
“Estamos muy contentos con este logro y por haberle dado una identidad a nuestro pabellón. Deseamos que estas actividades perduren en el tiempo para el beneficio de otros y queremos mostrar que, también, en este contexto, se pueden aprender cosas buenas que nos acompañarán cuando recuperemos nuestra libertad”, dijo Luis, uno de los impulsores del proyecto.
Desde la Jefatura del Servicio Penitenciario Bonaerense participaron el director provincial de Políticas de Inclusión Laboral y Educativas, Marcelo Iafolla; el subdirector general de Educación, Marcos Blanes; y la jefa del Departamento Cultura, Gabriela Ríos.
En tanto, en la Unidad 18 estuvieron el director de la Unidad 18, Germán Ahumada Lurbe; el subdirector de Asistencia y Tratamiento, Juan Manuel Vázquez; el jefe de Vigilancia y Tratamiento, Fernando Penise; el coordinador de Formación Técnica y Oficios, Víctor Orsi, la profesional de la oficina de Inclusión Sociolaboral, Mariela Moya; y ocho internos, uno en representación de cada celda del pabellón literario.