La Justicia federal intimó a Martín Insaurralde, exjefe de Gabinete del gobierno bonaerense y exintendente de Lomas de Zamora, a justificar el crecimiento de su patrimonio durante su paso por la función pública, informaron fuentes judiciales.
La intimación se la formuló el juez federal Ernesto Kreplak, luego de que los fiscales Sergio Mola y Diego Velasco requirieran que Insaurralde sea llamado a indagatoria por enriquecimiento ilícito y supuesto lavado de dinero.
Se trata de la causa que se inició cuando la modelo y acompañante de viaje Sofia Clérici ventiló en redes sociales que había compartido un paseo por Marbella, España, con Insaurralde, lo que desató una lluvia de denuncias contra el dirigente de Lomas de Zamora.
Ese viaje, que incluyó un fastuoso paseo en yate, costó “las sumas totales -según la moneda de pago utilizada- de cuarenta y un mil ochenta y siete con sesenta y cinco euros (EU 41.087,65) y ocho mil ciento ochenta y nueve con treinta dólares estadounidenses (USD. 8189,30)”, según surge del dictamen fiscal.
“Se le atribuye a Martín Insaurralde el haber incrementado su patrimonio de manera apreciable, sin que esto guarde relación con los ingresos lícitos obtenidos durante su carrera pública, al menos desde su asunción como intendente, el 28 de octubre de 2009, hasta el 30 de septiembre de 2023, hechos por los que le cabrá responder por el delito de enriquecimiento ilícito”, sostuvieron los fiscales.
Además señalaron que el ex jefe de Gabinete de Axel Kicillof contó con testaferros de los que se habría valido para poner “en circulación fondos provenientes de actos de corrupción vinculados al ejercicio de las distintas funciones públicas ejercidas por Insaurralde”.
Los fiscales acusaron a Insaurralde de supuesto lavado de activos y remarcaron que los fondos involucrados en la maniobra “tendrían su origen en actos de corrupción vinculados a los cargos públicos que ejerció desde, al menos, el año 2003 y habrían sido integrados al sistema económico formal mediante mecanismos que ocultan su verdadero origen”.
Entre las presuntas irregularidades detectadas por los fiscales, señalaron que el imputado se vinculó “con Andrés Enrique Galera, quien además de ser condenado como partícipe necesario del delito de enriquecimiento ilícito por ser testaferro del entonces Secretario de Obras Publicas de la Nación, controlaba la empresa Revilier S.A que era propietaria del departamento en Puerto Madero en el que vivieron Martin Insaurralde y Jesica Cirio en el año 2014”.
Los fiscales, además, pidieron que junto con el exintendente de Lomas de Zamora sean llamados a indagatoria su exmujer Carolina Álvarez, dos hijos suyos (Martín y Rodrigo Insaurralde), su sobrino Gastón Barrachina y el hermano de su excuñado, Víctor Donadío, a los que ubicaron en el presunto rol de testaferros.