El secretario de Derechos Humanos de la CGT, Julio Piumato, consideró hoy que «hay una contundente reacción de los trabajadores y el conjunto de la comunidad por las políticas que agreden a todo el pueblo argentino”, le pidió al gobierno que “reflexione frente a la contundencia de esta medida” y consideró que “los trabajadores han dado muestra, pese a todas las campañas, de cuál es la realidad en la Argentina».
En declaraciones formuladas a radio Provincia, el dirigente gremial se refirió a las declaraciones del ministro de Economía, Luis Caputo, quien dijo que “el sindicalismo está cada vez más alejado de la realidad” al analizar que «critican al sindicalismo cuando todas las medidas van en contra de los trabajadores y del trabajo. A ellos les preocupa los dirigentes sindicales porque necesitan quebrar las organizaciones gremiales para avanzar en una sociedad de esclavos».
Por otra parte, sostuvo que “la falta de diálogo es responsabilidad del gobierno que nunca nos ha convocado”, y agregó que “cuando uno no tiene diálogo, es porque no tiene nada para debatir». Seguido, planteó que “la realidad de Argentina es que todos están en una situación dramática y al final del túnel no hay luz, sino el precipicio”.
Respecto de la posibilidad de realizar una movilización cuando se discuta la Ley Bases en el Senado expresó: «Hay una voluntad clara de la CGT de seguir firme en la defensa de los trabajadores, no son un capricho los cuestionamientos hacia esta ley porque violenta la Constitución Nacional. La Ley Bases avanza sobre los derechos de los trabajadores. Se puede avanzar en más derechos, pero no sé puede retroceder en ellos. Esta Ley le hace muy mal a la Argentina».
Asimismo, indicó que «estas políticas llevan a la desindustrialización», por lo que valoró que en el día de hoy la UIA se haya sumado al paro. También, sostuvo que «la CGT va a continuar con la lucha porque esta situación no es inventada por los dirigentes. Tenemos que debatir qué modelos de país queremos y ser conscientes de que no se llegó a esto por inercia sino por los tremendos errores de la clase política. Hay que imputar menos errores al movimiento sindical».
Por último, Piumato opinó sobre el DNU: “Espero que los representantes del pueblo lo deroguen antes porque un país que descansa todo en la Justicia está fallando en sus órganos de gobierno. Es la famosa judicialización de la política. La justicia no puede resolver todo lo que pasa en el país. Por ello, tendría que ser rechazado por el Congreso».