El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, cuestionó hoy el juicio conocido como Vialidad por el que se la acusa a Cristina Fernández de Kirchner, y dijo que ayer, luego del discurso que efectuó la vicepresidenta, «terminó de desplomarse lo que es un verdadero circo, no es una causa ni es judicial».
«Ayer terminó de desplomarse lo que es un verdadero circo, no es una causa ni es judicial», dijo hoy el gobernador a la prensa, luego de la jura del ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa, en el Teatro Metro de la ciudad de La Plata.
Al ser consultado sobre su impresión luego de la declaración que ayer la vicepresidenta realizó por su canal de Youtube, Kicillof dijo que durante tres años «nadie transmitió el juicio» porque, precisó, «por cada testigo que llevaban los fiscales se iban cayendo las acusaciones».
«Las pruebas lo que mostraron es que Cristina no podía hacer eso que ellos dicen que hizo. ¿Cómo una obra ganada por licitación que se termina y se hace, es un hecho de corrupción? Es imposible», opinó el gobernador.
En ese sentido, afirmó que «como esa causa no existía, sacaron de la galera como un conejo, unos WhatsApp de José López donde dijeron ‘ahí los agarramos porque López era amigo de Cristina y Lázaro Báez'».
No obstante, Kicillof explicó que «Cristina en esos chats ni aparece», y que solo «hay algunas alusiones que el fiscal trata de dibujar, como si tuviera algo que ver para ponerla como jefa de una asociación ilícita».
«Traen ese material de forma ilegal porque es de otra causa, y al hacer un estudio se comprueba que José López tenía amigos constructores pero no era (Lazaro) Báez, era Nicolás Caputo que también tenia otro amigo del alma, que era Mauricio Macri», subrayó.
Por ello, el gobernador reiteró que «ayer se terminó no solo de desplomar (la causa) sino que fue un efecto boomerang, porque son ellos los que tienen que explicar de quien era amigo López».
Por otro lado, Kicillof cuestionó «la doble vara que existe cuando las causas contienen a algún macrista», ya que siempre se otorga la «falta de merito, sobreseimiento, o es todo exprés», mientras que cuando se trata de un dirigente kirchnerista, «aunque no haya una sola prueba, son años de años».
«Esto lo digo habiendo sido víctima de la causa conocida como Dólar Futuro, y varias causas más. A mí me embargaron por 15 mil millones de pesos por algo que nadie puede explicar ni de qué se trataba, por eso digo que estas cosas tienen efecto, generan bronca e indignación, y si alguien se indigna por una realidad, bueno, pero no si es una mentira con motivo electoral y político, así terminó que Lula (Da Silva) no pudo ser presidente, terminó siendo (Jair) Bolsonaro, y la sacaron a Dilma Rousseff», comentó.
Previamente, el gobernador señaló en declaraciones a Radio con Vos que la figura de asociación ilícita «es algo así como decir, ‘metafísicamente están asociados porque se conocen pero sin pruebas'».
«Es una figura que se usa para persecución política. Cuando no hay pruebas, usan esa figura», consideró.
Por eso, puntualizó que los fiscales a este juicio trajeron «dos o tres WhatsApp de otra causa porque no tenían nada, porque se les desparramó por el piso la causa».
«Si el alegato son los WhatsApp de López, entonces Cristina dijo bueno, me acusan de otra cosa, déjenme defenderme, y el Tribunal no la dejó opinar», cuestionó.
Manifestó que «si alguien se enriqueció ilícitamente, tiene que ir en cana, pero -dijo- a mi con el dólar futuro me inhibieron, me embargaron y me señaló el mismo sistema judicial, y era un armado».
«Tenemos que volver a dar esta discusión, si es que ellos sacan de nuevo causas truchas para tratar de señalar a su adversario político de chorro. La sociedad tiene que entender que no es un problema con los dirigentes políticos, o con Cristina, tiene que ver con las decisiones que se toman y con qué intereses se defienden», argumentó.