El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, encabezó hoy el acto de entrega de 325 patrulleros en la Escuela de Policía “Juan Vucetich”, donde subrayó que «nunca» en la historia en la provincia de Buenos Aires se invirtió en seguridad tanto como en la actual gestión.
Acompañado por miembros de su gabinete e intendentes bonaerenses, el mandatario expresó en el predio de Berazategui que «este logro es el resultado de un trabajo planificado y sistemático, además de una inmensa inversión que realizamos para la transformación de la policía».
Desde el Gobierno se indicó que en 2019, la actual gestión recibió 790 patrulleros «destrozados» para patrullar 1.100 cuadrículas (se cubría sólo el 67%) y se apuntó que la administración de Kicillof incorporó 11.131 nuevos policías y llegó a cubrir la totalidad de las cuadrículas del AMBA, con móviles nuevos que patrullan las 24 horas.
«Este era un depósito de chatarras. Los chalecos y el equipamiento, las armas, todo estaba en estado lamentable: en mal estado, vencidos o insuficientes», rememoró el gobernador y contó que debieron descartar muchos de esos elementos porque eran «inutilizables».
Sostuvo que «los cuatro años en que gobernó la derecha, en los que se llenaron la boca hablando de seguridad, hubo 5 mil hombres menos que al comienzo de la gestión, con salarios destruidos porque perdieron 29 puntos en poder de compra».
«Hoy estamos entregando 325 patrulleros 0km, sumados a los 4.585 ya entregados. Nunca se hizo una inversión de esta envergadura. Se renovó por completo el parque automotriz de la policía, 500 motos de alta cilindrada, chalecos antibala en perfecto estado para cada agente», describió y planteó que se creó un programa de incorporación de nuevos cadetes a la Escuela.
En el marco del Programa de Fortalecimiento de Seguridad, la provincia, además, compró 72.948 chalecos de protección balística; completó la provisión para el 100% del personal que lo requiere; se recuperó la capacidad de aeronavegabilidad; se incorporó 1 nuevo Bi-Motor y 3 Mono-motores para la Policía Bonaerense; se cuadruplicó el Grupo de Prevención Motorizado (GPM) con 611 efectivos y 500 motos.
En ese sentido, Kicillof agregó: «También hicimos un cambio en la formación y logramos la recuperación salarial, equiparando salarios con los de las fuerzas federales y luego haciéndolos crecer por encima de los valores de la inflación».
Luego, el economista señaló que «lo más importante es que modificamos el paradigma, el método de trabajo de nuestra policía con la formación de nuevos cuerpos -como el de Policía Rural-, con tecnología especial para el 911 y drones».
«A eso se agrega un cambio en la forma de trabajo de nuestra policía en el Conurbano: 16 bases de la Fuerza Barrial de Aproximación, con 300 efectivos especialmente capacitados y preparados para atender a los barrios con mayor vulnerabilidad de nuestro gran Buenos Aires», continuó y puso de relieve que esos oficiales cuentan con patrulleros y motos, pero «se caracterizan por ser caminantes y recorrer las veredas delos barrios más complejos desde lo delictivo y la violencia».
Así, enfatizó que se trata de policías «que están allí, conocen los vecindarios, cada particularidad de su geografía, por lo que dialogan e interactúan con los vecinos, acompañan a los chicos en las escuelas y a los comerciantes en las horas pico, y se van volviendo parte de esos barrios».
«Son efectivos que acompañan, que dan seguridad y tranquilidad al pueblo donde más lo necesita. Esto constituye una completa novedad. Contamos con 8.300 agentes capacitados para esta nueva tarea», remarcó Kicillof.
Consideró que «es un abordaje superador de lo planteado hasta ahora» dado que «antes los patrulleros daban vueltas, pero ese modo no actuaba como prevención ni alcanzaba para dotar de seguridad a determinados barrios».
«Tenemos que seguir invirtiendo. El camino no es el marketing, la publicidad, ni los anuncios vacíos, sino la inversión, la profesionalización y la presencia permanente. Es por ahí que estamos trabajando», resumió.
El mandatario recordó: «Dijimos que íbamos a formar un policía más cercana y más confiable. Necesitábamos empezar el camino de reconciliación entre la policía y el pueblo de la provincia. ¿Cómo no iba a ocurrir, si los trabajadores de nuestra policía son miembros de ese pueblo? Tengan la certeza de que este trabajo que iniciamos es el que vamos a continuar para cuidar a nuestro pueblo y a nuestra policía», cerró.
A su turno, el ministro de Seguridad, Sergio Berni, expuso: «No es este un día más, sino que después de una gran inversión y un gran esfuerzo volvemos a entregar nuevos patrulleros al Conurbano bonaerense que había sido olvidado por la anterior gestión».
«El gobernador se comprometió a transformar la policía, su capacitación, su formación y su capacidad operacional. Nada hubiera sido posible sin la incorporación tecnológica que hicimos, ni sin crear la fuerza barrial de aproximación, que cuenta con 1.800 efectivos», aseveró.
Sostuvo que «aquí hay planificación a largo plazo y no una reacción espasmódica a un problema de inseguridad».