El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, enviará el próximo lunes a la Legislatura el proyecto de Presupuesto 2025 y la Ley Impositiva, que establecerá los impuestos que deberán pagar los bonaerenses el año entrante, según informaron fuentes oficiales.

El ministro de Economía, Pablo López, adelantó ayer los puntos centrales de ambos proyectos en una reunión con el presidente de la Cámara de Diputados, Alejandro Dichiara; los jefes de los bloques de Unión por la Patria en Diputados y el Senado, Facundo Tignanelli y Teresa García, respectivamente; y el presidente de la Comisión de Presupuesto de Diputados, Juan Pablo de Jesús.

En este encuentro, se acordó que el lunes a las 10, López presentará los detalles de las propuestas ante los legisladores de todas las bancadas en el Anexo de la Cámara de Diputados.

Se espera que el martes las iniciativas tomen estado parlamentario en una sesión especial convocada para ese propósito, y luego se inicie el análisis en comisiones. Como es habitual, se llamará a distintos ministros y al titular de la Agencia de Recaudación (ARBA), Cristian Girard, para que expliquen a diputados y senadores cómo se destinarán los recursos a cada área.

En cuanto a la Ley Impositiva, ARBA anunció que para los contribuyentes del Impuesto Automotor e Inmobiliario Urbano se mantendrán las bonificaciones por buen comportamiento tributario, otorgando un 5% de descuento a quienes no acumulen deudas y un 10% por pago anual, que se sumarán a los beneficios vigentes.

Para el Impuesto Inmobiliario Rural, las bonificaciones aplicarán por buen cumplimiento, adhesión a débito automático y vinculación de la partida con el Cuit del contribuyente ante ARBA.

Sin mayoría propia, el oficialismo necesita el apoyo de sectores opositores para aprobar estas iniciativas, quienes a su vez presionan para incluir temas como la implementación de la Boleta Única de Papel y mayores fondos para municipios afectados por la reducción de recursos nacionales. Las internas dentro del peronismo también podrían agregar complicaciones a las negociaciones.

Este año, Kicillof debió gestionar con el Presupuesto 2023 prorrogado, dado que el gobierno nacional no presentó pautas macroeconómicas para 2024.