El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recorrió hoy las obras de remodelación en el Hospital Interzonal General de Agudos “General San Martín” de La Plata, donde le pidió a los legisladores que aprueben los proyectos de ley que envió para crear dos empresas públicas de salud.

Se trata del Centro de Industria Farmacéutica Bonaerense y la Empresa Bonaerense de Emergencia, que proponen la constitución de una Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria (SAPEM).

En su discurso, el mandatario expresó: “Estamos esperando que nos voten las leyes necesarias para seguir avanzando en el sistema de salud” y aclaró que “no hay ninguna decisión, ni un gasto que no tenga un objetivo”.

Así, remarcó: “los legisladores de la provincia tienen que estar a la altura para aprobar estas leyes” de creación de una empresa pública de emergencias de salud en la provincia y otra destinada a la producción de medicamentos.

Luego, reconoció que, en materia de salud pública, aún “falta muchísimo”, pero recordó que al asumir “veníamos de muy atrás” y en estos cuatro años se logró una “recuperación y reconstrucción del sistema sanitario”.

Rememoró que en lo que va de su mandato, se entregaron “323 ambulancias, se crearon 162 Centros de Atención Primaria de la Salud, unidades sanitarias móviles, quirófanos, se relanzó el Plan Qunita, se inauguraron seis nuevos hospitales de alta complejidad, se puso en marcha ocho hospitales modulares y se provincializaron tres municipales”.

Por otra parte, criticó el “proceso de ajuste clásico” que vive la Argentina debido a las políticas que aplica la administración de Javier Milei, y expuso que, esta vez, “tiene como particularidad la velocidad, lo despiadado y lo cruel que es lo que le hacen soportar a un pueblo que venía con dificultades previas”.

“Es muy triste lo que está ocurriendo en el Gobierno nacional. El presidente Milei se tiene que hacer cargo de lo que dice, de las agresiones, de la violencia, todo trabajador del Estado está apuntado. Habla del Estado como una organización criminal. Dice que es presidente para destruir al Estado”, reflexionó.

Sostuvo que se niega “a tomar esto con superficialidad o a dejarlo pasar”, criticó el hecho de que la Nación haya “interrumpido programas que implican que haya enfermos que no tienen los medicamentos que necesitan” y evaluó que “lo criminal es abandonar a la gente de esta manera”.

“Nosotros apostamos por esta lógica de Estado presente, que cuida y acompaña, con todas las dificultades que tenemos”, prosiguió y añadió: “No es que no haya plata, sino que nos están afanando la plata que hay sacándola de donde más se necesita y poniéndola donde sobra”.

El economista puntualizó: “Hoy estar poniendo en funcionamiento equipamientos muy costosos, casi un millón de dólares hoy solamente en este hospital”; remarcó que ello se lleva delante “con un esfuerzo mayor porque nos quitan los fondos” desde el gobierno central e indicó: “nosotros seguimos insistiendo en cuáles son las prioridades en la provincia de Buenos Aires”.

Criticó “el proceso de quita ilegal de recursos a las provincias” pero destacó que su administración se propuso “seguir trabajando porque no se puede interrumpir lo que es urgente, ni tampoco el trabajo de fondo para transformar el sistema de salud”.

“Venimos haciendo esto hace mucho tiempo, pero hoy vale mucho más porque es absolutamente a contramano de lo que está ocurriendo a nivel nacional. Sirve como demostración de que simplemente es una cuestión de poner las prioridades y los esfuerzo en donde corresponde”, concluyó.