El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, presentó hoy el primer sistema de producción industrial en contexto de encierro en la Unidad Penitenciaria N°1 de Olmos, donde se producen los componentes del Plan Qunita Bonaerense, y destacó la necesidad de transformar e invertir en el Servicio Penitenciario porque «si no se invierte después hablan de reincidencia, pero si no cambia nada vamos a tener el mismo resultado».
«Nuestro objetivo cuando asumimos era transformar el sistema penitenciario porque, además de haber sido declarado en crisis humanitaria, lo recibimos desfinanciado, abandonado, hacinado, en condiciones inhumanas y el resultado de eso es que los internos no salen para reinsertarse en la sociedad sino a reincidir», señaló Kicillof en un acto celebrado en el Polo Industrial de la Unidad Penitenciaria N°1 de Olmos.
En ese sentido, el gobernador indicó que «el sistema tenía que cambiar con una ampliación del servicio, que es una inversión inmensa», y agregó que cuando asumió en 2019 había 51 mil internos y 12 mil plazas en nuestras unidades penitenciarias.
«Había hacinamiento y esto es central para la seguridad pública, si no se invierte en esto después dicen que reinciden, pero si no cambia nada vamos a tener el mismo resultado», sostuvo.
Kicillof señaló que se hizo «una ampliación histórica» y detalló que además de «encontrar el lugar donde ubicar las unidades, necesitábamos cárceles cerca de donde viven las familias para que el vínculo con la familia no se perdiera».
«Como producto de esos trabajos tenemos en marcha obras para completar 8 mil unidades, y luego el año que viene 4 mil más. A las 24 mil que hay vamos a agregar 12 nuevas. La mitad entera de todo lo que había lo vamos a construir en 4 años. Llevó 200 años construir 24 mil plazas, en cuatro años agregamos un 50% más», detalló.
Además, destacó que la transformación implicó hacer foco en la educación y en el trabajo: «Este programa es más trabajo, menos reincidencia; más formación, más educación, más inclusión, menos reincidencia» y «esto implica que hoy 17 mil internos son estudiantes y que bajamos a la mitad la tasa de reincidencia».
En los talleres de la Unidad Penitenciaria N°1 de Olmos se producen los componentes del Plan Qunita Bonaerense – Nacimiento con Equidad, que será presentado en las próximas semanas.
Según se precisó, el programa es financiado por la provincia, se fabrica en el polo industrial y el Ministerio de Salud lo distribuye dentro del plan Nacional de los 1.000 días.
Los internos asisten a cursos cuatrimestrales de formación en los que aprenden a confeccionar todos los componentes del kit Qunita.
«Me llena de orgullo que el Qunita se esté fabricando en las cárceles de la provincia», afirmó Kicillof y destacó el rol de Thiago Ares, creador del kit.
En ese contexto, recordó la intervención de la justicia que impidió la continuidad del programa durante la administración de Cristina Fernández de Kirchner: «Su objetivo fue perseguir, no le importaba los pibes, las familias, los beneficiarios, le interesaba estigmatizar, ensuciar; y en el marco de esa persecución mandaron a quemar a Qunita».
«Este es un hecho de justicia. Al Qunita lo persiguieron, lo quemaron, pero acá lo tenemos. Vamos a producir 8 mil Qunitas por mes», anunció el gobernador y destacó que para la concreción del programa intervinieron ocho ministerios y el Banco Provincia.
Asimismo, señaló que «ha sido una verdadera proeza de coordinación de esos esfuerzos» y dijo que «cuando uno tiene el compromiso, aparece un componente adicional que sazonó todo este proceso que es la militancia. Este es un gobierno de militantes y el Qunita es un resultado claro».
El mandatario bonaerense estuvo acompañado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, el ministro de Salud, Nicolás Kreplak, el ministro de Trabajo, Walter Correa y el director general de Cultura y Educación, Alberto Sileoni.
«Con enorme satisfacción se inaugura hoy el primer sistema de producción industrial en contexto de encierro en nuestro país y uno de los más importantes de América Latina con la puesta en funcionamiento de cuatro fábricas», destacó Alak en el acto y subrayó que no se trata de un proceso «aislado, sino que forma parte del plan de transformación del sistema penitenciario bonaerense».
El ministro afirmó que «el plan tuvo dos objetivos: ampliar el sistema para atender la problemática de superpoblación y promover programas de reinserción para bajar la reincidencia» y señaló que «la provincia tiene 66 unidades y alcaidías y el legado es dejar en cada uno de los complejos un sistema de producción industrial calificado».
Por su parte, Kreplak indicó que el acto fue parte de «un proceso virtuoso de políticas de Estado que piensan en los que más necesitan, particularmente en los pibes y pibas que tiene que tener un futuro más lindo, un inicio de vida con más equidad, más belleza, ternura y más salud», y adelantó que está previsto que «en unas semanas» se entregarán las primeras Qunitas. Vamos a empezar a entregarlas».
«Esta política sanitaria es impactante, es mucho más que un kit, más que una cuna, se garantiza un sueño seguro y reducir problemas que generan una mortalidad», señaló el ministro y anticipó que será entregado «en las más de 200 maternidades que hay en la provincia de Buenos Aires», pero que antes «tiene que cumplir estándares de calidad para evitar errores, complicaciones».
Kreplak indicó que esta política «va a llegar a 90 mil niños y niñas que nacen cada año en la provincia de Buenos Aires, población que es beneficiaria de la asignación universal por embarazo y por hijo».
Antes de los discursos se emitió un video con un mensaje del expresidente de Uruguay, José «Pepe» Mujica, quien consideró que «este evento tiene importancia porque en América Latina organizamos las cárceles con una estantería donde guardamos la gente y poco nos preocupamos en cómo salen. Este camino que inician es una larga lucha y una larga deuda».