Kicillof reformuló su equipo de gobierno y designó a Insaurralde como jefe de Gabinete

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció hoy una reformulación de su equipo de Gobierno, tras los resultados de las PASO, y dispuso que el actual intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, sea su nuevo jefe de Gabinete.
El jefe comunal de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, será ministro de Infraestructura; y la diputada nacional Cristina Álvarez Rodríguez tendrá a su cargo el Ministerio de Gobierno provincial.
En tanto, Carlos Bianco -hasta hoy jefe de Gabinete- será el Jefe de Asesores del Gobierno y Agustín Simone -ministro de Infraestructura- tendrá a su cargo el Instituto de la Vivienda.
En ese sentido, el mandatario bonaerense afirmó que los cambios se llevaron a cabo «de cara a la etapa de reconstrucción que comienza a partir de la pospandemia».
Las modificaciones en el gabinete de la provincia de Buenos Aires se concretaron dos días después de los implementados por el presidente Alberto Fernández a nivel nacional y tras una reunión que el gobernador mantuvo hoy en El Calafate con la vicepresidenta Cristina Kirchner.
En declaraciones formuladas a C5N, el gobernador explicó que los cambios implementados en su equipo «dan un renovado impulso para la etapa que viene, siempre pensando que a medida que aflojan los indicadores epidemiológicos por el avance de la vacunación, viene la reconstrucción, el renacimiento y la reactivación».
Al respecto, en un comunicado, se remarcó que «con el objetivo de fortalecer la gestión provincial para dar las respuestas necesarias a las y los bonaerenses, y en consonancia con el recambio realizado por el presidente Alberto Fernández en el gabinete nacional, el Gobernador ha tomado estas determinaciones para que desde mañana mismo se ponga en marcha esta nueva etapa».
En el mismo marco, Kicillof agradeció «inmensamente el empeño y la labor realizada por Teresa García», quien hasta hoy se desempeñaba como ministra de Gobierno.
Con nuevas figuras en el organigrama ministerial, el Gobierno tiene previsto para la etapa de la pospandemia del coronavirus profundizar políticas de incentivo a la producción económica y el empleo para acelerar la reactivación.
En paralelo, el mandatario busca fortalecer el enfoque territorial y, con ese propósito, eligió a dos intendentes del conurbano con amplio conocimiento de las problemáticas bonaerenses y a una dirigente política con vasta experiencia y recorrido en la provincia.
A eso debe sumarse que Nardini e Insaurralde lograron victorias en las PASO para el Frente de Todos: el primero obtuvo en Malvinas Argentinas el 47,86% de los votos contra el 28,98% de tres listas de la alianza opositora Juntos; mientras que el segundo cosechó en Lomas de Zamora un 43,27% contra el 33,20% de las dos nóminas de Cambiemos.
«Hace varios días había anticipado que iba a haber cambios en mi gabinete, en vistas de lo que ocurrió electoralmente y de cara a lo que viene, que es un período de reactivación de la economía», graficó el mandatario.
Es que durante una entrevista exclusiva con Télam el martes pasado, el gobernador se había referido a posibles cambios en su gabinete al afirmar que en la provincia de Buenos Aires tenía «a disposición esa posibilidad para reforzar todas las áreas que precisamente esta situación que es tan especial necesitan impulsarse más».
Tras el resultado electoral de las elecciones PASO del 12 de septiembre, Kicillof mantuvo reuniones con los intendentes del Frente de Todos, tanto del conurbano como del interior bonaerense.
En esos encuentros, según se informó oficialmente, el mandatario evaluó «las principales demandas y necesidades de los vecinos y vecinas de los distritos para desarrollar medidas que brinden respuestas adecuadas» y, de ese modo, «fortalecer y recuperar su acompañamiento».
En ese tono, Kicillof dijo esta noche a C5N que «es un gabinete que ahora incorpora y fortalece el enfoque territorial y a dirigentes muy experimentados en la provincia de Buenos Aires».
Expuso que los cambios en su equipo «dan un renovado impulso para la etapa que viene, siempre pensando que a medida que aflojan los indicadores epidemiológicos, viene la reconstrucción, el renacimiento y la reactivación».
Luego, subrayó que el objetivo de la nueva etapa de gobierno será «estar cerca de la gente, de los bonaerenses», puso de relieve que Insaurralde y Nardini «vienen de ser intendentes y tienen experiencia muy grande en las cuestiones locales y territoriales».
«Esta reactivación se logra de abajo para arriba», continuó y remarcó que se deben «atender las problemáticas de la pospandemia».
«Recién ahora estamos llegando a niveles de contagio parecidos al comienzo de la primera ola. Estamos cerca de 650 casos por día, cuando hace 16 semanas eran 12 mil y eso es el efecto de la vacuna: tenemos 11 millones de personas con la primera dosis y 7 millones con la segunda», expuso Kicillof.
Sostuvo que asumió la gobernación tras «cuatro años de destrozo económico, social, del Estado, de la educación y la salud, y nos propusimos un proceso de reconstrucción porque para eso nos votaron», recordó que «a los tres meses, se inició una situación completamente inesperada y disruptiva que nos cambió la vida a todos».
Posteriormente, el mandatario recalcó que «ahora vamos a tener que acelerar el gobierno, agregarle más cercanía territorial para solucionar las dificultades d la vida cotidiana, recuperar el ingreso y crear trabajo».
«Estamos alcanzando niveles de vacunación que nos hacen pasar la página. Esto sienta niveles mayores de certidumbre. Sobre esa plataforma más firme, tenemos que abocar todos los esfuerzos a recuperar lo perdido», insistió.
«Son procesos económicos que llevan tiempo, pero las prioridades están ahí», dijo el mandatario y contó que está «en diálogo permanente con Alberto y con Cristina».
Después, anticipó que su administración formulará anuncios económicos, manifestó que «la salida de la pandemia debe darse con la aceleración del gasto en lo vinculado a las condiciones de vida».
«Con un Estado presente, el gobierno está para dar respuestas urgentes a las necesidades. Hay que estar cerca, estar disponible y tender una mano», prosiguió y reflexionó que «las incorporaciones que estamos haciendo con Insaurralde, Nardini y Alvarez Rodríguez, nos van a refrescar, fortalecer y permitir afinar la puntería en cuanto a las medidas y al enfoque territorial que tenemos que tener».
Para el economista se debe «apuntalar de todos los modos posibles el proceso de recuperación» y evaluó que «siempre después de la calamidad y catástrofe viene la reconstrucción».
«Estamos dispuestos a eso con un Estado presente», concluyó.