La defensa de Cristina Kirchner aseguró que «van a agotar todas las instancias judiciales»

El abogado de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, Carlos Beraldi, aseguró hoy que va a «agotar todas las instancias judiciales» en la causa por los cuadernos de la corrupción del kirchnerismo.
«Si se confirma el procesamiento (a Cristina Kirchner), siempre vamos a agotar las instancias judiciales», dijo Beraldi esta mañana en diálogo con AM 530.
Precisó que «frente a una confirmatoria (de la Cámara)», presentarán «un recurso de Casación» y, «eventualmente, ante una decisión adversa de Casación, presentarán un recurso extraordinario para acceder a la Corte (Suprema de Justicia)».
«Esto es para que quede en claro que todas las instancias judiciales, si es que se confirman, quedan contaminadas y no hay una decisión unipersonal sino que está funcionando un sistema que no tiene que ver con la administración de Justicia», sostuvo el letrado.
La Cámara Federal porteña debe dictaminar respecto a los pronunciamientos firmados por el juez Claudio Bonadio que, de ser confirmados, dejaría a la investigación a un paso de ser elevada a juicio oral y público.
Beraldi dijo que no le teme a un juicio oral, sino que, por el contrario, cree que «siempre es mucho más transparente» y permitirá que «las cosas salgan a la luz», entre ellas el hecho de que «las declaraciones de los arrepentidos no van a poder ser corroboradas», según opinó el defensor de la ex presidenta.
«Los que van a tener problemas en un juicio oral van a ser los que armaron todo esto. Cuando declaren los empresarios y tengan que explicar y dar razones concretas de dónde fueron las coimas y a quién se las dieron, las declaraciones de los arrepentidos no van a poder ser corroboradas», dijo el abogado de la senadora.
La semana pasada, Beraldi pidió a la Cámara Federal porteña que revoque el procesamiento de Cristina Fernández en la causa por los cuadernos de la corrupción del kirchnerismo, y criticó la investigación porque consideró que muestra «contradicciones», hechos «escandalosos» y «autoritarismo y arbitrariedad grosera», al exponer ante la sala I del Tribunal de Apelaciones.