El ministro de Desarrollo de la Comunidad de la Provincia de Buenos Aires, Andrés Larroque, afirmó hoy que el intento de magnicidio a Cristina Fernández de Kirchner es «uno de los hechos más conmocionantes de la historia democrática contemporánea».
Larroque está presente en los Tribunales de Comodoro Py, donde se encuentra prestando declaración la ex presidenta en el marco del juicio oral y público que se lleva adelante en los tribunales de Retiro.
El ministro, que ingresó a la sala de audiencia junto al gobernador Axel Kicillof, expresó su preocupación por la falta de avances en la investigación, señalando que «la justicia no ha investigado a los autores intelectuales del atentado”, y aseguró que “claramente no fue una acción de personas aisladas».
Larroque también advirtió sobre las consecuencias para la democracia: «Estas acciones nos dejan a todos en un estado de zozobra y ponen a la democracia en un lugar muy complejo, ya que nos retrotraen a un tiempo que creíamos haber dejado atrás en Argentina».
En este sentido, señaló que el odio subyacente detrás del intento de asesinato es parte de una persecución política más amplia contra un proyecto político que ha recuperado derechos para los argentinos.
“Cristina lo dijo en su momento, que no venían por ella, venían por el peronismo y claramente por los derechos que se habían recuperado en la Argentina”, sentenció.
Recordando los incidentes previos al atentado, Larroque mencionó «el apedreo del despacho de Cristina en marzo de 2023, el cercamiento de su domicilio y la virtual detención de quien era vicepresidenta en ese momento, instigada por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta y seguramente por Mauricio Macri». También mencionó la «cadena nacional del fiscal Luciani en una causa sin pies ni cabeza, como lo señaló oportunamente Cristina».
Además, destacó las irregularidades ocurridas durante el proceso, como la situación del teléfono de uno de los acusados, que «nunca se pudo abrir, lo que generó un conjunto de irregularidades desde el inicio de la investigación».
Finalmente, Larroque subrayó que el atentado fue producto de un clima de odio que se ha cultivado en la sociedad argentina, y que «gracias a Dios, esa bala no salió, evitando un hecho dramático y generando también un verdadero milagro».