El ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, pidió hoy en Merlo que fiscales y jueces de garantía «pongan la cara en el territorio» bonaerense y «no se hagan los distraídos» en el combate contra la inseguridad.
«Podemos tener los mejores móviles, el mejor armamento y los policías más entrenados pero si se detiene y detiene y la justicia libera y libera, de nada nos sirve el esfuerzo que se hace en la lucha contra la inseguridad», advirtió Massa esta mañana al participar en Merlo de la entrega de nuevos patrulleros, motovehículos y la presentación de la base de la Fuerza Barrial de Aproximación (FBA).
Massa estuvo acompañado en el acto por el gobernador de la provincia de Buenos Aires y precandidato a su reelección, Axel Kicillof, el ministro de Seguridad de la provincia, Sergio Berni, y el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez.
La FBA es una nueva especialidad de las fuerzas especiales de la Policía de la provincia de Buenos Aires, formada y entrenada para trabajar en proximidad con la ciudadanía, patrullar los barrios e implementar controles de seguridad, que actualmente cuenta con 4.000 efectivos.
Desde el Poder Ejecutivo se informó que «cuenta con una doctrina operativa de elevados estándares de intervención y un renovado equipamiento, logística y comunicaciones que le aportan soluciones e inmediatez en la resolución de conflictos y la preservación de la tranquilidad ciudadana».
Desde la Sala de Situaciones UTOI (Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas) de La Matanza se monitorea de forma constante a las Fuerzas de Aproximación Barrial de cada distrito. Allí los operadores observan los desplazamientos de los móviles y de todo el personal para garantizar el patrullaje y la seguridad de los vecinos.
A la vez, ese monitoreo está en constante enlace con la sala Multiagencia del Ministerio de Seguridad y de los municipios, en donde también en tiempo real se genera una interacción dinámica tanto organizativa como operacional.
Así, se monitorean diferentes operativos: controles vehiculares, manifestaciones, eventos masivos y todo tipo de desplazamiento de las fuerzas efectivas en el distrito.
«Cada peso que invertimos en mejoras salariales para la policía, en equipamiento, en chalecos, cámaras, móviles, logística de inteligencia y prevención es, en realidad, cuidar la vida de nuestro pueblo», enfatizó el precandidato presidencial.
Sostuvo que «es muy importante que el compromiso de nuestra policía, de nuestros intendentes, del gobernador y del ministro lo acompañe un compromiso en el territorio con presencia de fiscales y jueces de garantías que pongan la cara en el territorio» y pidió que los delincuentes «no entren por una puerta en la comisaría y salgan por la otra, mientras jueces y fiscales se hacen los distraídos».
En ese marco, pidió apostar «a la Argentina de la unión frente a la Argentina de la división» y analizó que «la patria puede desarrollarse en paz, con seguridad y con educación pública frente a aquellos que quieren el ‘sálvense quien pueda’.
«Nos tocó pasar una difícil, está terminando y lo que viene es mucho mejor. Lo tenemos que construir entre todos. Vayan a buscar a los que en algún momento se desilusionaron, díganles que nos costó, que cometimos errores, que asumimos nuestras culpas, que pedimos disculpas, pero tenemos la valentía para encarar lo que viene porque es con la unión de los argentinos», reflexionó Massa.
Finalmente, Massa planteó que valora y admira de Kicillof «que frente a cada problema plantea una solución», remarcó que «no esquiva los problemas ni los barre debajo de la alfombra, sino que los enfrenta» y razonó que «lo mejor que le puede pasar a la provincia de Buenos Aires es que Axel siga gobernando».
En su discurso, Kicillof enfatizó «tenemos un parque automotor como nunca antes», afirmó que cuando asumió «había 2.000 patrulleros destruidos» y apuntó que la flota bonaerense «era un deposito de chatarra».
El mandatario bonaerense rememoró que «en el conurbano había 790 móviles para 1.100 cuadrículas, por lo que sólo el 25% del área podía patrullarse», indicó que «se había perdido el 5% en cantidad de agentes policiales y lo salarial era paupérrimo».
«Había políticas de ajuste que hoy se pregonan como solución a los problemas pero sus resultados después son nefastas. Cayeron 29% los sueldos de la policia, le sacaron un tercio a su poder adquisitivo. Las fuerzas federales y porteñas tenían mejor salario que las policías bonaerenses. Hicimos una inversión sin precedentes y hoy con esta entrega estamos terminando de reemplazar completamente el parque de patrulleros con 5 mil nuevo patrulleros cero kilómetro», describió.
Por último, recalcó que ello «se notó en las estadísticas de la Procuración general (de la Suprema Corte) de estos tres años y medio» dado que «bajaron todas las estadísticas del delito» lo cual lo impulsa «a seguir trabajando para mejorar la seguridad».