Médicos nucleados en la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop) informaron hoy que fueron convocados por el Gobierno a la primera paritaria de 2022 junto a los estatales para el próximo jueves 27, y anticiparon que pedirán un «justo reconocimiento para los trabajadores de la salud», y abrir una paritaria propia.
Según un comunicado que difundió el gremio, la reunión será el jueves a las 15, en el marco de la Ley 10.430 (estatales), por lo que el sindicato de profesionales de la salud pública bonaerense anticipó que solicitará «la inmediata convocatoria a su propia paritaria de la Ley 10.471 (carrera profesional hospitalaria) una vez finalizada la discusión actual».
El Ministerio de Trabajo provincial citó a los representantes de los trabajadores estatales de la Ley 10.430 para el 27 de enero, y a los docentes el lunes 31, a las 10:30.
El año pasado, el Poder Ejecutivo logró acordar con todos los trabajadores estatales, con los maestros y con los empleados judiciales, pero la paritaria de los médicos de los hospitales provinciales fue cerrada por decreto.
«El gobierno de la provincia de Buenos Aires convocó a estatales y docentes para abrir la primera negociación del año. La paritaria 10.430 tendrá su primer encuentro el próximo jueves a las 15. Una vez finalizada la paritaria general de estatales, deberían comenzar las negociaciones sectoriales, entre ellas la de nuestra ley 10.471», expresaron desde Cicop.
En esa línea, agregaron que «además de reclamar un aumento que nos proteja del proceso inflacionario, desde Cicop vamos a exigir al estado provincial una propuesta salarial que contemple la enorme sobrecarga laboral que ha sufrido nuestro sector desde que comenzó la pandemia».
«Resulta indispensable que el Equipo de Salud -que hoy vuelve a estar sobre exigido por una tercera ola de proporciones- sea reconocido esta vez de forma justa y acorde a la tarea realizada», subrayaron.
En cuanto a la pandemia, el sindicato sostuvo que comenzó el 2022 «con una tercera ola que vuelve a tensionar al sistema de salud» y que si bien «la mayor demanda se encuentra en las guardias y centros de testeo, comienza a registrarse un aumento en el número de internaciones en salas generales y en unidades de terapia intensiva».
«Habrá que seguir de cerca todas las variables durante las próximas semanas para evaluar el impacto sobre todo el sistema de salud, que podría ser nuevamente significativo si transitamos una meseta elevada y prolongada», informó.