La ministra de Trabajo bonaerense, Mara Ruiz Malec, afirmó que la administración de Axel Kicillof tiene como objetivo «recuperar las funciones» de esa cartera con el fin de «intervenir de manera eficiente en los conflictos laborales, promover el diálogo social tripartito y generar acuerdos para preservar el empleo y los derechos laborales».
La funcionaria formuló esa afirmación durante el informe de gestión que brindó hoy por teleconferencia ante la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados bonaerense y dijo que, para lograr esa meta, es «indispensable dotar de personal al ministerio».
Ruiz Malez explicó que, al asumir, se encontró con «que se habían destruido 87 mil puestos de trabajo en el sector privado y mucha de esa gente fue a parar a la informalidad» y atribuyó ello a que el gobierno anterior implementó «un modelo económico que priorizó un camino económico que no funcionó».
Luego, contó que durante los primeros meses de gestión se buscó «mostrar que el ministerio volvía a ser la casa de los trabajadores» por lo que se inició una relación «con los actores de la sociedad civil».
«Nuestra misión es defender los derechos de las y los trabajadores y para ello apostamos al diálogo con cámaras empresariales y sindicatos», continuó y manifestó que se llevaron a cabo «maratones de encuentros con representantes sindicales de todos los sectores y centrales regionales».
Malec subrayó que el decreto de prohibición de despidos dictado a partir de la crisis surgida por la pandemia de coronavirus «fue efectivo» y contó que, ese marco, la cartera laboral dictó diversas resoluciones complementarias para el territorio bonaerense.
Destacó que, en esa coyuntura, se relevaron «unos 196 establecimientos del Conurbano con 11.650 trabajadores» y expuso que se recibieron consultas y denuncias vinculadas a incumplimientos de obligaciones laborales y sanitarias en la cuarentena.
«Durante la pandemia, implementamos todas las vías digitales para que las y los ciudadanos pudieran hacer sus denuncias», contó y recordó que se suspendieron los plazos procesales y que se dictaron resoluciones que establecen la obligatoriedad de las empresas cuenten con protocolos de higiene y seguridad.
Sostuvo que «los próximos meses van a ser difíciles», vaticinó que «nuestra intervención será requerida» y afirmó que «ahí estaremos, además, reforzando programas de empleo e inspeccionando las nuevas formas de trabajo».
Entre los objetivos del área, dijo que se planea atender no sólo a los trabajadores del empleo formal sino también a los informales; agilizar trámites, potenciar los programas, asesorar trabajadores y mejorar los actos inspectivos.
En ese sentido, añadió que se dotó de «mayor jerarquía al área de inspección laboral», aclaró que «nunca tendremos el plantel para ir a revisar todos los establecimientos».
«Además, no somos un organismo recuadador sino que queremos evitar las infracciones. Nosotros vamos por las acciones de prevención», opinó.