El ministro de Hacienda y Finanzas, Pablo J. López, celebró hoy la sanción del Presupuesto para 2022 y la Ley Impositiva y consideró que «permitirá reforzar el rol del Estado en áreas esenciales».
«Con amplio consenso, la Legislatura Bonaerense aprobó la Ley Impositiva y la Ley de Presupuesto del año entrante. Agradezco especialmente a Verónica Magario Federico Otermín, y a todos los y las legisladores que decidieron acompañar este proyecto», posteó el funcionario en redes sociales.
En ese marco, López destacó que el Presupuesto 2022 «permitirá seguir reforzando el rol del Estado en las áreas esenciales, como salud, seguridad y educación».
«También nos ocuparemos de las brechas estructurales de la Provincia, con una inversión récord en infraestructura y políticas de impulso a la producción», indicó el funcionario.
Consideró luego que «el Presupuesto 2022 es histórico: será el primero con perspectiva de género integral en la provincia de Buenos Aires» y cerró: «Contar con nuestra hoja de ruta es fundamental para cumplir con los ejes planteados por Kicillof. Agradezco a todo el equipo de trabajo que lo hizo posible».
La Legislatura bonaerense sancionó esta madrugada el Presupuesto 2022 -que contempla un gasto total para el año próximo de $ 3,1 billones y un pedido de nuevo endeudamiento de algo más de $90 mil millones- y la Ley Impositiva, que prevé un aumento de los impuestos patrimoniales del 35% promedio para la mayoría de los contribuyentes.
La denominada «ley de leyes provincial» -que plantea un déficit primario de $48.800 millones y uno financiero de $133 mil millones- se votó primero en Diputados y luego se sancionó en el Senado al igual que la Ley Fiscal.
El proyecto girado por el Poder Ejecutivo destaca que el rol del Estado estará «orientado a acelerar la recuperación económica» y a «garantizar los derechos sociales y equiparar las oportunidades de progreso de sus habitantes».
Afirma que en el 2022 se aumentarán los niveles de inversión pública en infraestructura en todas las áreas primordiales de la provincia por lo que «los gastos de capital en el año tendrán un incremento del 44,1 por ciento en términos reales y alcanzarán máximos históricos en jurisdicciones como Educación, seguridad, justicia y vivienda».