El Poder Ejecutivo reordenó partidas para reforzar áreas clave como seguridad, salud y educación, mientras recortó subsidios energéticos y habilitó avales para que las provincias accedan a deuda externa.
A través del decreto 186 publicado hoy en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional oficializó la primera modificación del Presupuesto 2025, en el marco de la falta de aprobación parlamentaria del proyecto enviado en septiembre de 2024.
Según se precisó, la reasignación de partidas generará un ahorro neto de $8.079 millones, sin afectar el superávit fiscal acumulado hasta el 10 de marzo.
Entre los principales cambios se destacan: la ampliación de los fondos del Ministerio de Seguridad para fortalecer el monitoreo de personas procesadas o condenadas; y el incremento de recursos para la seguridad federal.
También se destinan más fondos a la Agencia Nacional de Discapacidad para auditoría de pensiones por invalidez y al Ministerio de Salud para programas sanitarios; se reducen las transferencias estatales a Cammesa y se implementa un régimen especial de regularización de deudas para distribuidoras eléctricas.
Se refuerzan aportes a Energía Argentina S.A. (Enarsa) para avanzar en la construcción de las represas Cóndor Cliff – La Barrancosa en Santa Cruz; y se restablece la distribución automática de fondos educativos a provincias y municipios.
Además, se habilita al Ejecutivo a otorgar avales para que provincias y la Ciudad de Buenos Aires accedan a créditos internacionales. También se permite cancelar deudas provinciales mediante la cesión de bienes inmuebles estatales.
Educación
El decreto mantiene la emergencia en el sector energético hasta el 9 de julio de 2025, con la continuidad del esquema de reducción progresiva de subsidios, y establece un cupo fiscal de $195.000 millones para el Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento.
El Ejecutivo destacó que la medida no altera el equilibrio fiscal y que la ejecución presupuestaria hasta el 10 de marzo refleja un superávit base caja de $4,41 billones y base devengado de $3,41 billones.