El gobierno iraní volvió hoy a negar su implicación en los atentados perpetrados contra la embajada en Israel en Buenos Aires y la sede de la AMIA, y atribuyó las acusaciones a «parte de los complots del régimen sionista y de la mafia del poder en Argentina».
Teherán renovó su defensa al responder a las imputaciones formuladas por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, durante su visita de esta semana a Buenos Aires.
«La República Islámica de Irán condena los atentados de los años pasados en Buenos Aires y rechaza las acusaciones contra los ciudadanos iraníes a este respecto», insistió la Cancillería del país persa en un comunicado reproducido por la agencia oficial de noticias IRNA y EFE.
La nota calificó de «sin fundamento ni valor» las acusaciones de Netanyahu, quien cargó contra el «terrorismo» iraní en su visita a Buenos Aires y vinculó a Teherán con los atentados que causaron 29 víctimas mortales en la embajada de Israel en 1992 y 85 en la mutua judía AMIA en 1994.
Durante una de sus actividades hace dos días en territorio argentino, el primer ministro israelí aseveró que «Irán tiene un aparato terrorista que abarca todo el mundo, con sus aliados de Hezbollah operan células terroristas en muchos continentes, incluso en América latina».
El Ministerio iraní de Exteriores aseguró que las acusaciones de Netanyahu son «parte de los complots contra Irán del régimen sionista (Israel) y de la mafia del poder en Argentina» que tratan -agregó- de «ayudar a los verdaderos responsables a escapar del castigo».