El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aseguró hoy que «las pymes son el corazón productivo de la Argentina» y vaticinó que «serán protagonistas centrales de la recuperación económica cuando termine la pesadilla del coronavirus».
«Para la salida de la pandemia tenemos que encontrar instrumentos financieros más efectivos, novedosos y profundos a disposición del entramado de las pequeñas y medianas empresas», expuso el mandatario al encabezar la apertura de las conferencias virtuales por el 25°Aniversario del Fondo de Garantías Buenos Aires (Fogaba).
Acompañaron al gobernador el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el ministro de Producción bonaerense, Augusto Costa; y el presidente del Banco Provincia, Juan Cuattromo.
El gobernador resalto que «pocas veces una cuestión tan dramática afecto a toda las economías del planeta de manera simultánea», dijo que el coronavirus generó «un legítimo shock externo» que «atacó a todos los países y a la economía del planeta».
En ese marco, sostuvo que «las vacunas que están en fase experimental y cerca de poder ser aplicarlas en esquema de emergencia» dotarán al mundo de una «respuesta médica moderna y contemporánea».
Kicillof planteó que los efectos económicos de la pandemia «no tienen precedentes» ya que el Covid-19 generó «un cráter económico bien profundo y heterogéneo en todo el planeta».
En esa línea, analizó que la inversión «conecta el presente con el futuro» pero remarcó que «si el presente es complicado y el futuro incierto, hay dificultades», por lo que estimó que «es ahí donde el sector público tiene que tener un papel fundamental para acelerar la recuperación».
«En este marco complejo hay que buscar instrumentos de integración y articulación entre lo público y lo privado», continuó el mandatario bonaerense y apuntó que a esa situación debe agregarse «el problema estructural de la Argentina sobre el financiamiento de las empresas pequeñas y medianas».
Kicillof destacó la necesidad de «lograr mecanismos de financiamientos para la pequeña y mediana empresa» porque «a las crisis suelen sobrevivir los que tienen más espalda, más recursos financieros hay más capacidad de acumulación previa».
En ese tono, dijo que se debe contrarrestar la concentración económica, «algo que genera en los mercados lo contrario de la competencia, con sus efectos sobre precios, cantidades, calidad y disponibilidad de bienes».
Así, refirió que la actual es una de las crisis «más grandes de la economía moderna», pero destacó que «la presencia de la vacuna pone un horizonte de salida».
Kicillof expuso que es preciso «trabajar conjuntamente entre el Estado y los privados para que la salida sea la más eficaz y rápida, logrando una economía bien posicionada para el futuro y evitando la concentración y monopolización de sectores económicos».
«Tenemos que encontrar para la salida de la pademia instrumentos financieros más efectivos, más novedosos y profundos a disposición del entramado de las pequeñas y medianas empresas.
Para eso, opinó que se requieren «herramientas de inversión disponibles para todo los segmentos, particularmente los medianos y pequeños».
A su turno, Kulfas planteó que desde que comenzó la pandemia se trabajó «codo a codo» con el gobierno provincial «para enfrentar el daño que generó el coronavirus» y destacó instrumentos como «el ATP, el IFE, el financiamiento impulsado por la banca pública, un paquete de ayuda que generó recursos por el equivalente al 6,8% del PBI».
«Hoy vemos una recuperación heterogénea: hay actividades aún afectadas como la cultural, la hotelería y los viajes; la gastronomía se está recuperando; hay crecimiento en la industria, la construcción y la cadena agroalimentaria», describió.
Sostuvo que en el marco de la crisis, el Gobierno tuvo la capacidad «para generar herramientas desde lo productivo», vaticinó que habrá una «recuperación vigorosa en 20212 y estimó que «la provincia de Buenos Aires será uno de los motores de la reactivación económica».
«Esperamos, a partir de la vacuna, poder incluir a las actividades severamente golpeadas», remarcó.
En ese plano, Kulfas aseguró que se necesita generar «un proceso de inclusión financiera de las pymes, con fondos como el Fogaba y desde la banca pública» y graficó que desde el Fogar se avalaron 46 mil micro y pequeñas empresas y 550 mil monotributistas y autónomos.
«Tenemos un gran trabajo hacia adelante para incluir financieramente a las pymes, que son el corazón productivo de la Argentina y serán protagonistas centrales de la recuperación económica», finalizó.
El Fogaba es una sociedad anónima con participación estatal mayoritaria de la provincia de Buenos Aires, cuya misión es facilitar el acceso al financiamiento de las Mipymes bonaerenses por medio del otorgamiento de garantías y del asesoramiento económico y financiero.