El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pidió este martes al presidente Javier Milei “que pare de dejar al pueblo sin alimento, medicamento, vivienda, transporte y combustible” porque debido a las políticas que implementa la administración nacional “la están pasando mal millones de personas”.
El mandatario bonaerense formuló esas declaraciones al entregar viviendas, camiones para separación y reciclaje de residuos y maquinaria en el municipio de Malvinas Argentinas, junto al intendente Leonardo Nardini.
Allí, el gobernador se refirió a la necesidad de capacitar a la población en materia medioambiental; destacó la labor de los recicladores y remarcó que también “tiene que haber inversión y política pública, porque esto no lo resuelve un individuo, sino que tiene que ser colectivo y general”.
“Es importantísimo que esto sea universal, no lo puede hacer nadie si no es el Estado”, planteó.
Por otro lado, tras entregar 36 viviendas del Complejo Residencial Morse en Pablo Nogués, Kicillof criticó que el Gobierno nacional haya dejado paradas 16.000 obras en la provincia de Buenos Aires y reflexionó: “Guita para el espionaje tiene, pero para terminar las casas, no hay plata”.
“Usan la plata para la timba o el sector financiero”, continuó el economista y explicó que “muchas familias se quedan sin acceso a la vivienda por la relación entre el salario, el costo de la tierra y el precio de la construcción”, situación a la que calificó como “muy injusta”.
Sostuvo que “el Gobierno nacional debe parar de abandonar sus funciones indelegables, parar de dejar al pueblo sin alimento, medicamento, vivienda, transporte y combustible”, agregó que “no lo votaron para esto y nos está trayendo muchísima dificultad” porque “la están pasando mal millones de personas y no les importa”.
En ese sentido, analizó que el hecho de que Milei haya desregulado el precio de las garrafas no tiene que ver con el ajuste del gasto público, sino que es una actitud relacionada con la “crueldad” y con “no gobernar para las mayorías”.
“Vamos a seguir entregando viviendas para las familias. Que nadie les ponga en la cabeza que no se lo merecen. Es un derecho constitucional la vivienda digna y es una obligación del Estado hacer todo lo que tiene a su alcance para que puedan vivir dignamente y mejor”, finalizó el mandatario.