El ministro de Desarrollo y secretario general de La Cámpora, Andrés Larroque, destacó hoy que la denuncia que derivó en la causa por el Memorándum con Irán «se hizo el 14 de enero de 2015 se utilizó para definir un proceso electoral y cambiar un modelo económico de distribución del ingreso en la Argentina».
«También se hizo para que el país entrara en la noche más oscura del neoliberalismo con todos los padecimientos que eso le trajo a millones de personas», analizó el funcionario en declaraciones a FM Futurock.
Sostuvo que «por supuesto que (el proceso) recayó en algunas personas en particular, centralmente en la figura de Cristina como expresión máxima de un proyecto político, pero eso fue utilizado para alterar las circunstancias políticas de un país».
Ayer, la vicepresidenta Cristina Kirchner fue sobreseída por inexistencia de delito en la causa por la firma del Memorándum con Irán por el atentado a la AMIA.
Los jueces María Gabriela López Iñiguez, Daniel Obligado y José Michilini además sobreseyeron al procurador del Tesoro de la Nación, Carlos Zannini; al senador Oscar Parrilli; al viceministro de Justicia, Juan Martín Mena y al propio Larroque.
En ese sentido, el ministro dijo que «esto es lo que debería haber pasado desde el primer momento» y apuntó que «el proceso fue tan bochornoso y extravagante que hasta nos acusaron de traición a la patria y después la Cámara lo corrigió».
«Yo estuve procesado y tenía fueros. No hubo pedidos de detención, pero a mi familia le afectó. Hubo compañeros que la pasaron muy mal», destacó y recordó a Héctor Timmerman, a quien consideró «un patriota».
Para Larroque, lo ocurrido tiene que ver con que «se desarrollaron estas estrategias de lawfare y de utilización política del Poder Judicial» y analizó que se necesita «una Justicia mejor, que esté acorde al sistema democrático y al funcionamiento de la república».
«La denuncia original de Alberto Nisman, que ocupó las tapas de los diarios, tenía 298 fojas. Apenas la leímos, nos dimos cuenta de que era algo absolutamente delirante», rememoró y expuso que «vimos lo mismo que resolvió ayer el tribunal: no había ningún tipo de delito y era una denuncia armada con recortes periodísticos y citas de servicios de inteligencia free lance».
Sostuvo que «esta denuncia se presentó en feria (judicial) mientras la jueza (Romilda) Servini de Cubría, quien entendió que no ameritaba abrir la feria para tratar la denuncia».
«Luego, el hijo entendió que esa denuncian no tenía nada que ver con la causa de encubrimiento. El sorteo posterior le cayó a (Daniel) Rafecas, quien entendió que no había delito. La Cámara dijo lo mismo y el fiscal de Casación también desestimó la necesidad de reabrir la causa», indicó.
Larroque recordó que «después apareció la denuncia conexa de (Claudio) Bonadío e intervino Casación, y se reabrió la causa» y añadió que «el proceso no tiene parangón en la Justicia».
«Ojalá que ese sector del Poder Judicial honre el mandato que tiene», concluyó.