Pedro Biscay, el último director del Banco Central que respondía al kirchnerismo y que hoy fue removido de su cargo, acusó al Gobierno de haberlo sacado por pensar distinto y dejó la puerta abierta para una respuesta judicial de su parte.

«El Gobierno me echó por opinar diferente, es peligroso e interfiere en la autonomía del Central y sus directores», sostuvo.»Quienes llegaron al Gobierno enarbolando las banderas de la República, la pisotean día a día», señaló a radio La Patriada.

«Existen elementos y razones para poder actuar judicialmente. Aquí se ha avasallado un pliego del Senado de una forma muy abrupta y salvaje», afirmó. Es que el pliego de Biscay (a diferencia de muchos de los actuales directores, que están en «comisión») fue aprobado por el Senado en 2014, cuando también se nombró a Alejandro Vanoli como presidente de la entidad monetaria.

El Gobierno removió a Biscay como director del Banco Central, por «mediar mala conducta e incumplimiento de los deberes de funcionario público», luego del dictamen emitido el martes por una comisión bicameral en el Congreso.

«Me levante hoy sabiendo que el Presidente de la Nación iba a actuar en una clara violación a las garantías constitucionales, dejando de lado un principio básico para nuestra democracia que es la libertad de expresión, de opinar y publicar las ideas en la prensa», opinó Biscay.

«El Gobierno se tiene que sincerar y decir hacia a dónde lleva a la Argentina -repuso-. Estos avances del Gobierno Nacional perforan la calidad jurídica del Estado de Derecho. No estamos en un Estado de Derecho».