El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, aseguró que el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires inició gestiones para comprar vacunas contra el coronavirus pero los laboratorios les informaron que «aún no habían podido cumplir con los compromisos con los Estados nacionales» y no podían firmar contratos con «Estados subnacionales».
En tanto, la Legislatura porteña debatirá hoy el proyecto impulsado por el Ejecutivo local para la compra de vacunas contra el coronavirus, el cual fue modificado en su redacción original tras el retiro de un artículo que incluía a «las conductas negligentes» por parte de las empresas farmacéuticas entre las causales para los reclamos indemnizatorios que el Estado podría reclamar ante alguna falla.
Según informaron fuentes parlamentarias a Télam, el expediente será parte de los temas que tratarán los legisladores en la sesión ordinaria, cuyo inicio será a las 12, y cada bloque tendrá diez minutos para referirse al tema.
«Nosotros desde el primer día nos relacionamos con todos los fabricantes de vacunas del mundo», dijo Quirós anoche en una entrevista que brindó al canal América TV.
Sin embargo, aseveró que «las empresas privadas que en ese momento tenían vacunas, que son 3, contestaron las 3 que aún no habían podido cumplir con los compromisos con los Estados nacionales, por lo cual hasta que no terminen esos compromisos no podían dialogar sobre los nuevos compromisos con Estados subnacionales».
«Efectivamente es una política global de esas empresas en el mundo», sostuvo, y añadió que «estamos explorando todas las posibilidades que hay, no solo para el corto plazo, porque ahora en el corto plazo hay cierto flujo de vacunas, sino además para ser una opción más en la compra en el mediano y en el largo» plazos.
También, afirmó que «toda producción nacional de vacunas es un avance para el desarrollo científico técnico argentino».
De esta manera, Quirós coincidió con las informaciones brindadas por el Gobierno nacional acerca de las negociaciones que desarrollan las diversas jurisdicciones para comprar vacunas y los inconvenientes para rubricar contratos, especialmente por la provisión de los medicamentos.