La brasileña Rebeca Andrade cerró el programa de gimnasia artística de los Juegos de París con una medalla de oro en suelo, por delante de la estadounidense Simone Biles, que se salió dos veces del tapiz en su rutina.
Andrade logró su cuarta medalla en el Estadio de Bercy, primera de oro, con 14,166 puntos. Biles se quedó en 14,133 y el bronce fue para la también estadounidense Jordan Chiles con 13,766.
Unos minutos antes Biles se había quedado fuera del podio en la barra de equilibrio, aparato en el que Andrade fue cuarta.
La norteamericana termina con tres oros y una plata y la brasileña con un oro, dos platas y un bronce.
Andrade: “Deseaba un oro con todas mis fuerzas”
Andrade aseguró que deseaba un oro “con todas las fuerzas”, aunque las cuatro medallas ganadas en París tienen importancia para ella.
“No puedo elegir, porque todas son especiales para mí. Nuestro bronce en la competición por equipos fue muy importante, era algo con lo que habíamos soñado como equipo y algo que yo también deseaba de verdad”, aseguró tras concluir la competición en el Estadio de Bercy.
“En cuanto a mis medallas individuales, es lo mismo. Sabía de mis posibilidades (de ganar medallas) y lo di todo. Estaba luchando por conseguir por fin un oro, porque lo deseaba con todas mis fuerzas. Estoy muy contenta de haberlo conseguido hoy”, dijo.
Solo tras la última nota se quedó tranquila, admitió, “porque la competición solo termina cuando termina”, apuntó entre risas.
Andrade se declaró “muy orgullosa”.
“La gimnasia no es un deporte fácil, exige mucho de nuestro cuerpo y nuestra mente. Confiaba en ser capaz de gestionar toda la presión y trabajé con mi entrenador para conseguir lo que hemos hecho”, afirmó.