Mario Riorda, el creador del documental sobre comunicación política «En el nombre del pueblo», recientemente estrenado en la plataforma Flow de Cablevisión, analizó que en la campaña para las elecciones presidenciales de octubre «existe una ínfima presencia de discursos programáticos con propuestas de políticas públicas». Para el experto, la comunicación política en Argentina «representa las mismas tendencias que la comunicación política a nivel internacional: altísimos niveles de ideologización cada vez más explícitos, enorme personalización de los candidatos, predominio avasallante de la negatividad, ínfima presencia de discursos programáticos con propuestas de políticas públicas y altísima interacción digital inflada y sostenida por industrias informales y en muchos casos ilegales». Además, sostuvo que «la novedad de la campaña del 2015 fue lo que se denominó el voto miedo, y hoy la campaña arranca exactamente con un voto miedo, pero invertido». Riorda apuntó que «es como si se repitiera la campaña de 2015 pero al revés en términos de miedo, que constituye la versión más potente de las distintas categorías que pueda tener el discurso negativo». Evaluó que, asimismo, «esa negatividad es transversal a dos ejes recurrentes del discurso que tienen que ver con una fuerte hiperideologización por un lado, que intenta pelear a un discurso de tipo económico o de lo que se denomina de voto retrospectivo». «El actual oficialismo, ante el déficit de consenso de su propia gestión, ideologizó explícitamente su relato y el kirchnerismo, quizás con la necesidad de correrse hacia el centro, acentuó el rasgo económico y minimizó algo de su discurso ideológico para captar a los desencantados del centro», opinó.
