Roberto Baradel denunció ante la OIT que el gobierno “destruye las políticas del trabajo, empleo y seguridad social”

El Secretario General de la Central de los Trabajadores de la Argentina de la provincia de Buenos Aires (CTA-de los trabajadores) denunció ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que se realiza en Ginebra, Suiza, que el gobierno de Javier Milei “destruye las políticas del trabajo, empleo y seguridad social” y “ataca a la clase trabajadora”
El dirigente gremial, que además es secretario General del Sindicato de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (SUTEBA) y secretario de Relaciones Internacionales de la CTA Nación, señaló que “ha degradado al Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social en una Secretaría”.
Baradel participa de la Asamblea General de la OIT en el marco del estudio general sobre los sistemas de administración de trabajo en todo el mundo.
En ese marco, destacó “la importancia de la justicia social como elemento fundamental para el desarrollo sostenible y para la realización de la sociedad en su conjunto”.
A la vez, planteó: “No puedo dejar de mencionar la situación actual en Argentina donde el gobierno ha promovido distintas políticas que han destruido la administración del trabajo y las políticas de empleo en general”.
En el encuentro, del que participan ministros de trabajo y dirigentes sindicales de más de 180 países, se preguntó: “¿Qué pensarían los participantes de esta Conferencia si algunos de sus miembros afirman que ‘La justicia social es una aberración’?”.
“La nueva administración ha implementado su plan económico y social mediante normas de rango inferior, en clara violación a la Constitución argentina. Y constituyen un plan sistemático de cambio del patrón de acumulación que beneficia a sectores concentrados y viola de forma sistemática derechos y garantías sociales que gozan de la más alta protección constitucional”, apuntó.
El dirigente sindical planteó que “en los primeros meses de la gestión de Milei se eliminaron múltiples instituciones, se desprendieron áreas dedicadas a derechos humanos y desarrollo social”.
“¡Con mucho pesar y vergüenza, quiero decirle que es uno de los principios rectores del actual gobierno argentino, que debemos rechazar de forma unánime!”, manifestó.
En el cierre de su discurso contó que se registraron más de 20.000 despidos, hizo mención a la reducción de ministerios, a la desregulación del comercio, la industria y habló de la fijación de precios “que ha afectando el nivel salarial real de los trabajadores y trabajadoras”.
Por último, denunció el recorte de salarios de trabajadores de su actividad, “tras la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente, que había sido parte de su salario durante más de 25 años, eliminado el presupuesto destinado a ello”.