Más de 1.300 llamados de personas en situación de encierro en la provincia de Buenos Aires fueron atendidas por la Subsecretaría de Derechos Humanos bonaerense en este mes de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, dispuesto por el gobierno nacional con motivo de la pandemia por coronavirus, informó el organismo provincial.
A partir de la cuarentena la Subsecretaría de derechos Humanos dispuso para las personas en contextos de encierro dos líneas de atención telefónicas las 24 horas: (0221) 5912628 y (0221) 5895591, y una tercera de lunes a viernes de 8 a 18 hs: (0221) 4294057.
Desde la declaración de la pandemia de Covid-19, las líneas de atención de la Subsecretaría de Derechos Humano de la Provincia recibieron 1316 denuncias.
Las principales demandas fueron solicitud de arresto domiciliario por parte de personas que manifestaron ser agentes de riesgo o estar en condiciones para acceder a ese derecho.
El principal flujo de demandas provino de Unidades Penitenciarias, representando el 89,6% de las denuncias.
Según detalló un comunicado, de los 1316 casos, 1179 provienen de ese contexto de encierro; y el resto de las, llamadas se reparte en comisarías, denuncias anónimas y alcaidías.
«El objetivo de la Subsecretaría en este último mes ha sido la puesta en marcha de este plan que nos permitió articular con otras áreas del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos para atender las demandas de un grupo vulnerable como son las personas privadas de su libertad», explicó el Subsecretario Matías Facundo Moreno.
Sostuvo que «las cárceles de la Provincia están sobrepasadas en su capacidad de alojamiento por lo que el Ministerio dispuso una serie de medidas como las mesas de diálogo, en las que la subsecretaría participa, o el permiso para acceder a teléfonos celulares. Nosotros además dispusimos dos líneas telefónicas de atención las 24 horas y otra de atención de lunes a viernes de 8 a 18».
«Eso nos permitió realizar una intervención a favor de las personas detenidas, entendemos deben ser escuchadas en sus demandas por lo que enviamos notas a más de cien juzgados y tribunales de distintos departamentos judiciales de la provincia. Se está haciendo mucho y acompañamos la transformación del servicio penitenciario y comisarías, e instamos a la justicia acompañe estos cambios», apuntó.
En la última semana (del 10 al 17 de abril) se registró un aumento considerable de llamados. Eso evidenció la confianza que se ha generado en las personas privadas de su libertad y sus familiares para con la Subsecretaría de Derechos Humanos lo que contribuyó al fortalecimiento de estos canales de comunicación.