Detectar el alzhéimer con un simple análisis de sangre está cada vez más cerca. Un equipo internacional de investigadores ha probado la utilidad de un biomarcador en sangre, la proteína p-tau217, para detectar la enfermedad en 1.767 pacientes de España, Suecia e Italia.

Hasta ahora, los biomarcadores más usados para detectar esta enfermedad, que afecta aproximadamente a 60 millones de personas en todo el mundo, se obtienen del líquido cefalorraquídeo de los pacientes mediante técnicas invasivas y/o costosas.

Para avanzar hacia un diagnóstico equivalente y más sencillo, los científicos llevan años estudiando la presencia en sangre de diversas moléculas que parecen servir como biomarcadores, es decir, que actúan como señales de alerta temprana, ayudando a los médicos a identificar el alzhéimer a través de un simple análisis.

En el estudio de esos biomarcadores ha sido fundamental el trabajo de científicos asociados a varios centros españoles: el Hospital del Mar, el BarcelonaBeta Brain Research Center(BBRC), el centro de investigación de la Fundación Pasqual Maragall, la Universidad Autónoma de Barcelona y el Barcelona Institute of Science and Technology (BIST).

Un biomarcador clave

Tras la comparación exhaustiva de diversos biomarcadores en plasma, los autores presentaron este miércoles en la revista Nature Medicine su avances con la proteína p-tau217, que nos acercan a un diagnóstico del alzhéimer más accesible y menos invasivo.

En el ensayo han participado 1.767 pacientes de España, Suecia e Italia con síntomas cognitivos propios de la enfermedad. Tenían una medida de 73 años, y de ellos el 53% eran mujeres y el 37% hombres.

En total, 1.219 análisis se llevaron a cabo en centros de atención especializada y 548 en atención primaria usando una plataforma automatizada ya presente en muchos centros: Lumipulse.

El resultado ha mostrado la utilidad de este biomarcador en sangre para detectar alzhéimer, y la eficacia de utilizar una gran plataforma, como la citada, de uso en atención primaria, lo que permitiría un cribado poblacional de la enfermedad a gran escala.

Los resultados vienen a apuntar “la utilidad clínica de este marcador y la capacidad de extender su uso de las consultas especializadas hacia consultas menos especializadas”, señaló Eloy Rodríguez, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla-IDIVAL, en una plataforma recogida por Science Media Centre.

Este hallazgo “contribuirá a democratizar el diagnóstico biológico de precisión de la enfermedad de Alzheimer, evitando en muchos casos la necesidad de hacer determinaciones de marcadores más invasivas (punción lumbar) o caras y menos disponibles (PET)”, agregó Rodríguez.

Fuente: EFE