La gobernadora María Eugenia Vidal reconoció que la provincia se endeudó un 5% más que en la gestión de Daniel Scioli , pero aclaró: «No es decisión del gobernador endeudarse, es una ley de la Legislatura por el presupuesto de cada año, donde estamos en minoría. Muchos de los que integran el Frente para Todos votaron ese endeudamiento».

En una entrevista con Luis Novaresio para el programa Debo Decir, Vidal contó que fue víctima del machismo en la política: «Hay una resistencia para reconocer que una mujer gobierna la provincia, se la banca y toma sus decisiones». Se dice que ella es Mauricio Macri , Heidi o un hada virginal. Al cuestionar esto, lanzó: «Pareciera que Vidal nunca puede ser Vidal».

Además, al hablar sobre el endeudamiento en la provincia, explicó que «todos los intendentes recibieron fondos de esa deuda para hacer obras». Entonces, comparó: «Esa deuda se ve en las obras. La de Scioli no sé en qué se invirtió». La oficialista dijo que si lo tuviera en frente no le diría nada porque gobernó con «desidia». «Hay algo peor que la corrupción y es la indiferencia, que es imperdonable», disparó contundente.

Por el contrario, se mostró más abierta al diálogo con el resto de las figuras del kirchnerismo. Vidal dijo que, si Axel Kicillof le ganara en las elecciones , ella lo llamaría y se reuniría con él para trabajar juntos. Para la funcionaria, su competidor no es un candidato sino el sistema que gobernó la provincia por 28 años. «Kicillof puede ser una cara nueva pero el espacio sigue siendo el mismo», describió.

Al ser consultada sobre si participaría de un debate contra su principal competidor, la gobernadora contestó que lo pensaría, pero aclaró: «Creo que es muy importante que haya reglas de debate en serio. No quiero un concurso de chicanas. No me prestaría a eso».

Además, se remitió a las denuncias de la hermana Martha Pelloni, quien dijo que La Cámpora es el brazo del narcotráfico en la política de Cristina Kirchner . «No tengo elementos para decir que La Cámpora está vinculada al narcotráfico en la provincia», dijo. Y definió a Máximo Kirchner como «un dirigente muy relevante que se proyecta como el futuro del kirchnerismo».

Más adelante, habló sobre Cristina, y reconoció el hecho de que la expresidenta haya llevado a cabo la Asignación Universal por Hijo por la importancia que tiene «que haya un piso mínimo de ingresos». Sin embargo, disparó: «En términos personales, lo que conozco no me parece digno de admirar».

«Si gana Alberto Fernández , ¿quién gobierna?», le consultó el periodista. «Gobierna el pasado y ahí no creo que haya mucha diferencia», respondió la gobernadora al referirse a las discusiones que protagonizó, esta semana, el precandidato a presidente con varios periodistas. «No queda claro. Es difícil esta unidad de ultimo momento», señaló.

Según proyectó, por el alto nivel de polaridad, es posible que las elecciones se definan en la primera vuelta. Y enfatizó: «Es importante que la gente vaya a votar y se exprese en las PASO».

Según destacó, «la historia va a recordar a Macri como un valiente» porque «no hizo la fácil» sino que trabajó para «poner al país de pie a riesgo de poner en riesgo su capital político». También destacó la valentía de Miguel Pichetto y dijo que siente orgullo de compartir el espacio con él.

Tal como opinó, la principal diferencia entre el kirchnerismo y el oficialismo reside en los valores porque, para ella, en Cambiemos hablan «con la verdad sobre la mesa» y reconocen cuando se equivocan. «Ser honesto es condición necesaria pero no suficiente para hacer política», reflexionó.

De esta manera, Vidal dijo que no niega la realidad y que sabe que «han sido años difíciles». «Encontramos una economía con cepo, con inflación, con tarifas que no estaban sinceradas y al borde del colapso energético. Salir de eso fue doloroso», dijo. Y agregó: «El sacrificio que les pedimos vale la pena. Empiezo a sentir que salimos para adelante».

En línea con esto, aunque dijo que se generaron 500.000 puestos de trabajo, reconoció que hay más desocupación. Según sostuvo, esto se debe al crecimiento de la población y al hecho de que haya «más gente que busca trabajo».

Sobre las tarifas prometió que, en lo que queda del año, no va a aumentar la luz. Y explicó que, en los años subsiguientes, debería incrementarse en función de la inflación pero ya «no de una manera desproporcionada». «El 75% de la tarifa de luz ya está sincerada. Queda muy poco», dijo.

Finalmente, sobre la polémica por los aportantes truchos reconoció que «fue un error no bancarizar la campaña», pero aclaró que «nadie se quedo con la plata de nadie». «Ni siquiera estamos aceptando aportes por ventanilla», contó. Además, dijo que si hubiera corrupción en su gobierno, ella lo denunciaría. «No soy comentarista de la realidad si hay un delito tengo que denunciar, sino soy cómplice».