Seguro que piensas en muchas ocasiones que tu hijo es inagotable, y es que los niños pequeños tienen una energía extra a la que es difícil seguir el ritmo, más aún si tu hijo es muy inteligente y necesita constantemente nuevas formas de saciar su curiosidad. Aquí te contamos unos consejos que te serán muy útiles para ayudar a desarrollar la inteligencia de tus hijos.

Son muchas las formas y las herramientas que tienes a tu alcance para ayudar a tu pequeño a que desarrolle y potencie su mente desde sus primeros días de vida:

El lenguaje. Los niños inteligentes empiezan a hacer sonidos con tan solo 5 meses y comienza a hablar antes de cumplir el año. Una forma sencilla y efectiva de motivarle a que haga esto, es que le habléis durante todo el día. Puedes explicar a tu bebé lo que estás haciendo en ese momento y él retendrá toda esa información aunque a simple vista parezca que no te está prestando atención. Mientras más hables a tu niño más palabras aprenderá; los niños menores de 18 meses suelen aprender una palabra nueva cada día. Si tu pequeño ya ha cumplido un año de edad, es un momento excelente para que le leas libros infantiles, de esta forma adquirirá una mayor riqueza en su vocabulario y a la vez tendrá afición por los libros cuando sea mayor.

Los juegos. Jugar con ellos es divertido y muy favorecedor para su mente en desarrollo. Si es un bebé puedes jugar a hacer ritmos con objetos que tengas en casa. Si tiene uno o dos años, puedes optar por juegos de cartas de contraste: día y noche, blanco y negro… O bien puedes jugar a los colores y las formas geométricas. Para los más mayores, se recomiendan juegos tradicionales de mesa como la oca y el parchís para desarrollar la función lógica matemática.

La música. Está demostrado que la música clásica estimula y desarrolla la inteligencia de los más pequeños de la casa. Puedes poner música clásica de fondo mientras juegas con él o mientras realizas las actividades cotidianas. Son varios los estudios pedagógicos que explican el gran aporte que hace la música a la mente de los niños.
Inteligencia emocional.

Los niños aprenden a través de las emociones es por ello que hay que estar a su lado en el día a día para explicar las cosas desde un punto de vista emocional. Los niños inteligentes tienden a ser más sensibles y sobretodo hasta los 3 años de edad prima más su lado emocional que el racional. Explícale en cada caso concreto por qué ocurren ciertas cosas: por qué os tenéis que ir del parque aunque él no quiera, por qué ese niño le ha quitado su juguete…Y abrázale siempre que quieras y siempre que tu hijo o hija lo necesite. Los niños con una autoestima reforzada serán adultos felices.

Actitud de crecimiento. La actitud de crecimiento es la creencia de un niño en que si se esfuerza puede hacerlo mejor. Y esto se consigue a base de alabar lo que hace. Si te muestra un dibujo dile: “se que te has esforzado mucho en hacerlo y te ha quedado muy bonito”, en lugar de : “eres el niño más listo que hay”. Desarrollan así un actitud de superación ante el fracaso.

Y a todo lo anterior hay que añadir que debes estar a su lado para apoyarle y a la vez dejarle libertad para que desarrolle su inteligencia por sí mismo y pueda aprender de los errores que comete. Las actividades en familia también son un gran aliciente para la mente de los más pequeños, se sienten motivados, queridos y realizados. Tres puntos clave para desarrollar la inteligencia de los hijos.