La utilización de la capacidad instalada en la industria bajó en agosto a 60,5%, desde el 63% de igual mes del año pasado, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Esta merma estuvo relacionada con la caída de 6,4% que registró la actividad fabril entre agosto de este año e igual mes del año pasado, según el propio Indec.
Los bloques sectoriales que en agosto presentaron niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al promedio fueron las industrias metálicas básicas 81,8%; refinación del petróleo, 79,8%; papel y cartón, 73,4%; productos minerales no metálicos, 71,9%; productos del tabaco, 64,6%; y productos alimenticios y bebidas, 63,3%.
De estos rubros, solo dos utilizaron una mayor capacidad que el año pasado, y fueron la refinación del petróleo, con 79,8%, contra 78,1% del año pasado; y productos alimenticios y bebidas 63,3%, frente a 61,7%.
Los bloques que se ubicaron por debajo del nivel general fueron textiles con 58,8%; edición e impresión, 57,9%; sustancias y productos químicos, 51,6%; productos de caucho y plástico, 50,2%; la industria metalmecánica excepto automotores, 47,5%; y la industria automotriz 43,5%.
La actividad industrial bajó en agosto 6,4% en relación con igual mes de 2018, cayó 2,8% respecto de julio y acumuló un descenso de 8,1% en lo que va del año, según el Indec.
Como muestra de esta menor actividad, y reducción de la utilización de la capacidad instalada, unos 2.500 empleados que se desempeñan en plantas de Arcor en Córdoba, San Luis, Tucumán y la provincia de Buenos Aires fueron notificados para que se tomen vacaciones a partir de mediados de octubre. Según la empresa, la decisión fue tomada por «la caída del consumo y la acumulación de stocks».
A mediados de septiembre, el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, dijo que las «condiciones económicas» cambiaron «muy fuerte» después de las PASO del 11 agosto.
En los meses previos “veníamos con mejora de empleo; el desempleo había dejado caer y había actividades con indicios de recuperación. Ahora debemos estabilizar la economía y trabajar para la conservación del empleo», dijo Sica en declaraciones a la prensa.
Y, ayer, Sica adelantó a empresarios y legisladores las medidas que impulsará el Gobierno en el Congreso para el desarrollo productivo y la generación de empleo.
Los puntos principales apuntan a bajar de 35% a 22% el Impuesto a las Ganancias para las pequeñas empresas, las micropymes; reducir a la mitad los impuestos y suavizar la transición de las empresas que pasan del monotributo al régimen general.
Además, impulsa crear la Cuenta Única Tributaria que permitirá a las empresas pagarle a la AFIP con las deudas que la AFIP tiene con ellas; y eliminar las contribuciones patronales a los nuevos empleos creados durante 2020 y reducir la carga a la mitad en 2021, sólo para las empresas que aumenten su plantilla de empleados.