El jefe de Gabinete, Marcos Peña, evaluó hoy que la respuesta que recibió el gobierno nacional de parte de los gobernadores sobre la reforma tributaria «ha sido muy positiva», y precisó que la «discusión se acota a impuestos específicos», pero aclaró que «de ninguna manera refleja una complicación en términos de romper el clima de diálogo o consenso» entre las partes.
En una conferencia de prensa realizada en el CCK tras una reunión de gabinete ampliado, la primera que se realiza luego de los comicios legislativos del 22 de octubre, Peña estuvo acompañado por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, junto a quien defendió la reforma tributaria presentada esta semana.
«La reforma tributaria presentada hace pocos días es una extraordinaria herramienta para lograr un sistema tributario más justo, que ponga el énfasis en la creación de trabajo, que logre equiparar las cargas de manera más equitativa y más progresivamente, aliviando a los sectores más vulnerables, al igual que el combate a la inflación», destacó Peña.
Al igual que lo hizo ayer al exponer ante el Senado, el jefe de Gabinete indicó que las economías regionales se verán «beneficiadas» por la reforma tributaria y subrayó el «excelente espíritu de diálogo que encontramos en la búsqueda de consenso entre los gobernadores y el gobierno nacional».
«La respuesta ha sido muy positiva y la discusión se acota a una partecita, a un par de impuestos específicos que afectan a sectores productivos como el vino o los electrónicos de Tierra del Fuego, pero de ninguna manera refleja una complicación en términos de romper el clima de diálogo o consenso general que hay para lograr avanzar en esta dirección de la reforma», sostuvo Peña.
En ese marco, el jefe de Gabinete indicó que «hay discusiones sectoriales puntuales sensibles para esas provincias», con las cuales «se van a generar instancias de diálogo para la semana próxima con cada sector y discutir con los números en la mesa, para ver el camino de la implementación y escuchar los argumentos».
«No estamos imponiendo nada, sino dando un marco de diálogo, trayendo la propuesta sobre la mesa y generando diálogo en un marco de seriedad y tranquilidad. Hay que ser muy prudentes, estas cosas no están resueltas, son discusiones en las que buscamos escuchar a todas las partes y llegar a puntos de acuerdo», manifestó el funcionario nacional.
Por último, Peña también remarcó el «espíritu» que encontró ayer en el Senado, donde «la mayoría de las bancadas ven con buenos ojos el grueso del concepto y piden un par de discusiones puntuales para plantear» sus reclamos.
Según Dujovne, «en cinco años» serán eliminados «buena parte de los impuestos distorsivos» que hoy impidieron al país el «crecimiento y la generación de empleo, entre el 2001 y el 2016», y argumentó: «Con esta reforma se van a lograr las condiciones para hacerlo. Y en ese marco, todos los sectores productivos van a tener una situación muchísimo mejor de la que tienen hoy».
El ministro señaló que la intención del Gobierno es «reordenar la estructura de alícuotas impositivas» y que en ese marco «hay una sana discusión que tenemos que dar con los gobernadores, en el Congreso, en un diálogo que nos enriquezca a todos» aunque advirtió que «habrá algunos que tengan que ceder un poco, pero encontremos soluciones que favorezcan a todos, más allá de los intereses específicos de algunos sectores».
«Es muy sano que estos temas estén sobre las mesa y los discutamos y encontremos soluciones óptimas para todos los argentinos», dijo Dujovne, para luego precisar sobre Mendoza, que el vino «tiene una alícuota del cero por ciento en impuestos internos, cuando otros productos no alcohólicos tenían impuestos más altos» y que en Tierra del Fuego los productos electrónicos
«Estamos bajando un impuesto que favorece a los consumidores y que no afecta los derechos adquiridos por los productores de Tierra del Fuego, porque las exenciones en esa isla abarcan al impuesto a las Ganancias y al impuesto al valor agregado. Tenemos una oposición a que bajemos los impuestos internos en el continente que redundaría en una mejora del poder adquisitivo de todos los argentinos en términos del acceso a productos que de ninguna manera son de lujo como computadoras y celulares», concluyó.
Coparticipación federal e ingresos brutos son dos de los ejes que el Gobierno llevará a la mesa de diálogo con los gobernadores la próxima semana, cuando sean recibidos por el mandatario y sus ministros en Casa Rosada el próximo jueves 9, con una agenda de temas que incluirá, entre otros, el reparto de la obra pública, el Fondo del Conurbano y el impuesto al cheque.
Por otro lado, en el marco de la conferencia de prensa ofrecida hoy en el CCK al término de la primera reunión ampliada tras las elecciones legislativas de octubre, Dujovne negó tener internas con su par de Producción, Francisco Cabrera, a raíz del impuesto al vino que contemplaría la reforma tributaria: «Esta es una propuesta de la gestión del presidente Macri, por lo tanto desmiento que haya diferencias en la visión acerca de la reforma”, aseveró.
En este sentido, Dujovne subrayó la colaboración de “todo el equipo de Gobierno en la elaboración” de la reforma tributaria.