La llegada de los robots al mundo del trabajo generará que para 2030, entre 400 y 800 millones de personas deban cambiar de ocupación, y 375 millones no encuentren un nuevo empleo debido a la falta de preparación, demostró hoy un estudio internacional.
El balance surgió del estudio «Lo que el futuro del trabajo significará para trabajos, habilidades y salarios», realizado por el McKinsey Global Institute (MGI) en 46 países de todos los continentes, del que participaron expertos del departamento de Economía de Oxford y del Banco Mundial.
De acuerdo al análisis, que analizó 800 oficios, «el cambio afectará principalmente a las naciones ricas, como Estados Unidos, Japón o Alemania, impactando en la clase media, ya que aproximadamente el 25% de los puestos de trabajo serán automatizados».
En cambio, en países en vía de desarrollo «donde se estima que la falta de presupuesto hará imposible adquirir tecnología para automatizar trabajos, sólo el 9% de los puestos se verán afectados por la presencia de robots», precisa la investigación, que menciona entre estos últimos a India y México.
Según MGI, será esencial para mantener puestos de trabajo que en los planes de estudios se incluyan capacitaciones tecnológicas y que las empresas y organismos hagan los mismo con sus empleados.
Los puestos que se verán más afectados serán los relacionados con operaciones de maquinarias, conductores de taxis y oficinistas.
En tanto los trabajos de jardinería, plomería y cuidado se verán menos perjudicados por la automatización, predijo el estudio.
Los autores de la investigación instaron a los gobiernos a generar políticas públicas para que la ciudadanía pueda adaptarse a la automatización laboral.