Como forma de celebrar el nacimiento de Jorge Luis Borges (1899-1986), colaboradores del Centro de Estudios y Documentación Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional recibirán mañana al público en tres barrios de Buenos Aires, claves en la vida y obra del escritor argentino más importante del siglo XX: Palermo, Recoleta y San Telmo, con la idea de invitar a conocer las zonas inmortalizadas por el autor de «Ficciones».
«Las calles de Buenos Aires ya son mi entraña», dice un joven Borges en «Las calles», poema que abre su primer libro, «Fervor de Buenos Aires», publicado en 1923, que de alguna manera inaugura una relación significativa en la historia de la literatura argentina y universal: la de un poeta, narrador y ensayista que observa, piensa, siente y camina la ciudad que lo marcaría para siempre.
Y es que Buenos Aires es fundamental para comprender la literatura del autor argentino más universal: desde su infancia rodeada de libros en Palermo hasta sus recorridos metafísicos por Constitución o el Bajo, pasando por su cargo de director de la Biblioteca Nacional, cuando funcionaba en San Telmo. La dimensión mítica de la ciudad -con sus cuchilleros, sus arrabales, sus misterios- es parte de su inagotable universo ficcional.
«Esta ciudad que yo creí mi pasado/ es mi porvenir, mi presente; los años que he vivido en Europa son ilusorios,/ yo estaba siempre (y estaré) en Buenos Aires», dice en «Arrabal», otro poema de «Fervor de Buenos Aires», que de alguna manera sintetiza su sentir profundo por la ciudad que cobró un nuevo sentido a partir de su mirada poética, filosófica y, ante todo, literaria.
«Borges reúne las características de un escritor universal, argentino y netamente de Buenos Aires. Cada lugar que visitaremos en este recorrido está representado, de diversas maneras, a lo largo de su obra», cuenta a Télam Germán Álvarez, organizador de la propuesta que invita a conocer lugares emblemáticos en la vida y obra del autor de «El Aleph».
Y explica: «La idea surge del Centro de Estudios y Documentación Jorge Luis Borges, donde funcionaron las antiguas oficinas donde Borges fue director. Queremos que la gente participe a través de las redes. Son tres recorridos borgeanos: Palermo, Recoleta y San Telmo. Visitamos lugares significativos en su vida y obra». La propuesta consiste en que cada uno tome una foto en cada lugar del recorrido y la comparta en Twitter mencionando la cuenta de la Biblioteca Nacional: @BNMMArgentina.
El recorrido comienza mañana, a partir de las 11, en el barrio de Palermo, «donde estaba la casa donde vivió de niño cuando volvió de Ginebra. La casa de su abuela y la casa de sus padres, así como la Escuela Superior de Varones N° 1, que no existe más. Toda esa etapa tiene que ver con su primera literatura», sostiene el organizador.
Y explica que en Recoleta, a las 13, «visitaremos la sede de la Biblioteca Nacional, donde jamás estuvo pero puso la piedra fundamental, en el año 71. No le gustaba el barrio, no le gustaba el proyecto, pero lo hizo igual. Vivió un tiempo largo hasta la muerte de su padre, en el año 38. Ahí empezó a leer ‘La Divina Comedia’, aprendiendo italiano».
«También visitaremos el Cementerio de La Recoleta, donde está su familia, y por último el edificio de San Telmo. Vamos a recorrer la casa de Estela Canto, que primero fue novia y luego amiga de Borges, y después iremos a la vieja sede de la Sade en la calle México, donde fue director de 1950 a 1953. En el segundo patio se leían poemas. El asistía pero no leía porque era tímido, pero siempre leían cosas suyas», explicó Álvarez.
Las actividades finalizarán a las 17.30 en la antigua sede de la Biblioteca Nacional (México 564), donde se recibirán a los participantes de la actividad en el hall del edificio. Además, a las 18, se llevarán a cabo una serie de lecturas: el músico, escritor y físico argentino leerá «El libro de arena» y el escritor y crítico Martín Kohan leerá «Utopía de un hombre que está cansado».
Además se podrá visitar el viejo despacho del autor de «El informe de Brodie» y escuchar, en su propia voz, el célebre «Poema de los dones». La actividad es gratuita y no incluye transporte entre los recorridos. En su famoso poema «Fundación mítica de Buenos Aires», Borges apunta: «A mí se me hace cuento que empezó Buenos Aires: La juzgo tan eterna como el agua y el aire».