El Turismo Rural, con recorridos por hermosos paisajes campestres y con actividades que permiten conocer las costumbres de la gente de campo, como así también su historia y su identidad cultural, es uno de los atractivos más importantes de Colón para estas vacaciones de invierno, informó la Dirección de Turismo de esa localidad entrerriana.
Las excursiones campestres, además, permiten tomar contacto con las historias de los inmigrantes, con paisajes de llanuras plagadas de vegetación y grandes espejos de agua y con el trabajo rural realizado en forma artesanal.
La directora de Turismo de Colón, María Rosa Santander, señaló a Télam que «estos recorridos también brindan la posibilidad de degustar alimentos saludables y de alojarse en un ámbito rural junto a las familias que viven en esos sitios».
Colonia Hughes y el Falansterio Durandó, a 13 kilómetros de Colón, son dos de los sitios ideales para el desarrollo del Turismo Rural por sus viejas casonas campestres, por su exposición y venta de sulkys, carruajes, arados, muebles y otros elementos ligados a la vida campestre, elementos que permiten entender las formas de vida rural de hace 145 años.
Santander afirmó que «también es imperdible la visita a una capilla de 1895 dedicada a San Luis Gonzaga».
Colonia Hughes también cuenta con una granja educativa con visitas guiadas que permiten conocer aspectos ligados a la cría y a las características de aves ornamentales de gran atracción por su plumaje colorido, como los faisanes y pavos reales, entre otras especies.
San Anselmo, una colonia situada a 16 kilómetros de Colón, es otro de los parajes entrerrianos vinculados al Turismo Rural porque cuenta con varias actividades ligadas a ese segmento, las que encuentran un complemento ideal en el kayakismo, los paseos en lancha y el cicloturismo a la vera del río Uruguay.
La directora de Turismo de Colón sostuvo que «la idea fue crear otras opciones para que los turistas puedan permanecer más días en la zona atraídos por otros recorridos y otras actividades».