La salud del papa Francisco mejoró, por lo que los médicos que lo atienden en el hospital Gemelli desde hace 26 días decidieron anular el pronóstico reservado y precisaron que pasó una noche «tranquila».
En el parte de hoy el Vaticano indicó que el Sumo Pontífice “pasó una noche tranquila, se despertó cerca de las 8:00″.
Ayer, se indicó que las condiciones del Santo Padre siguen siendo estables. Las mejoras registradas en los días precedentes se han ulteriormente consolidado, como confirman tanto los exámenes de sangre como la objetividad clínica y la buena respuesta a la terapia farmacológica. Por estos motivos este lunes los médicos han decidido que el pronóstico no es más reservado”.
No obstante, se aclaró que «en consideración de la complejidad del cuadro clínico y del importante cuadro infeccioso presentado al internarse, será necesario continuar, por ulteriores días, la terapia médica farmacológica en ámbito hospitalario”.
El Papa, de 88 años, se encuentra internado desde el 14 de febrero pasado en el hospital Gemelli, de Roma.
