Según informó la CEA, en el encuentro, los obispos le manifestaron a las
autoridades “su preocupación por la situación económica, especialmente en
aquello que tiene que ver con la contención de aquellos sectores vulnerables que
sufren, principalmente la falta de alimento y medicamentos”.
Además, los obispos -en nombre de la Comisión Permanente, que se encuentra
reunida este martes y miércoles en la sede porteña de la CEA de la calle Suipacha- llevaron también las “inquietudes” de los prelados de las distintas provincias del país por la situación que se vive en cada uno de esos distritos.
Participó de la reunión la Comisión Ejecutiva de la CEA, encabezada por su
presidente, monseñor Oscar Ojea, junto al vicepresidente 1° Marcelo Colombo, el
vicepresidente 2° Carlos Azpiroz Costa y el secretario general, Alberto Bochatey.
En una carta reciente con motivo de la Cuaresma, los obispos de Merlo-Moreno, Juan José Chaparro y Oscar Miñarro, lamentaron que “los responsables del gobierno nacional sólo se preocupen de que cierren las cuentas y no miren a los hermanos heridos por las medidas que se van tomando”.
Por parte del Gobierno nacional, junto a Milei, estuvieron la canciller Diana
Mondino; la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello y el Secretario de
Culto, Francisco Sánchez.
Los obispos agradecieron a las autoridades del Poder Ejecutivo “la escucha
atenta a todo lo planteado” y asimismo “reafirmaron su disposición a colaborar en
el trabajo por el bien común y la paz social”.
Al finalizar el encuentro, los obispos le regalaron al Presidente una edición del
libro “Statio Orbis” que narra la oración del papa Francisco en la Plaza de San
Pedro al comienzo de la pandemia de coronavirus y el mensaje para la Jornada
Mundial de la Paz.
De diferentes formas y con distintos pronunciamientos, los integrantes de la
Iglesia vienen expresando su preocupación por el deterioro de la situación social,
a partir de las medidas implementadas por el gobierno de Milei.
En una carta con motivo de la Cuaresma, difundida en las últimas horas, los
obispos de Merlo-Moreno, Juan José Chaparro y Oscar Miñarro, lamentaron que
“los responsables del gobierno nacional sólo se preocupen de que cierren las
cuentas y no miren a los hermanos heridos por las medidas que se van tomando”.
El documento, que lleva además la firma del Equipo de Pastoral Social y de
Cáritas de la misma diócesis, señala que la Cuaresma -el tiempo litúrgico que se
vive 40 días antes de la Pascua- “nos pide esta conversión de cuidar la vida” algo
que atañe “también y especialmente a aquellos que tienen la responsabilidad
institucional de conducir los destinos de la Patria y de nuestro Pueblo”.
A comienzos de marzo, los denominados “curas villeros” difundieron un crítico
documento en el que cuestionaron la decisión del Gobierno nacional de eliminar el Fondo de Inversión Social Urbano (FISU), que administraban organizaciones sociales en los barrios populares y vulnerables.
Bajo el título “No al recorte en políticas públicas en villas, asentamientos y barrios
populares”, en el texto -que fue firmado por el equipo de más de 50 sacerdotes de las villas y barrios populares del país– se advirtió que esa decisión significa “un retroceso que genera mayor exclusión y, por lo tanto, inseguridad y desintegración social”.
La reunión del Episcopado con los trabajadores de Télam
Por otro lado, la semana pasada, el titular del Episcopado, monseñor Ojea, recibió
a una delegación de Télam -integrada por la secretaria general de Fatpren, Carla
Gaudensi y el secretario general de Sipreba, Agustín Lecci- para conocer de
primera mano el conflicto en la agencia Télam, cuyo cierre fue anunciado por Milei
en su discurso del 1 de marzo ante la Asamblea Legislativa.
“Junto con el presidente del Episcopado, recibimos la preocupación de los
trabajadores de Télam por el posible cierre de la agencia de noticias y la
consecuente pérdida del empleo de los periodistas. Deseamos una pronta
solución a este conflicto que pone en riesgo las fuentes de trabajo de más de 700
argentinos y argentinas”, expresó en su cuenta de la red social X el vocero del
Episcopado, Máximo Jurcinovic.