El Gobierno de Javier Milei anunció hoy la apertura de importaciones para productos de la canasta básica, tras la reunión que mantuvo en las últimas horas el ministro de Economía, Luis Caputo, con supermercadistas.

«Se tomó la decision de abrir definitivamente las importaciones de determinados productos de la canasta familiar en pos de hacer los precios más competitivos con alguna quitas de impuestos», indicó el vocero presidencial, Manuel Adorni.

El día que se conocerá el número de inflación de febrero, el vocero sostuvo que «se han reconocido suba de precios por encima de la expectativa de inflación».

En su habitual conferencia de prensa, Adorni consideró que esta suba de precios se dio porque el mercado había evaluado un escenario económico, «catastrófico», pero enfatizó que «eso no ha ocurrido».

«Entendemos que la economia de a poco se va normalizando», consideró el funcionario nacional.

En la reunión que mantuvo este lunes con supermercadistas, Caputo descartó la posibilidad de una segunda devaluación y le pidió a los empresario que no convaliden subas «desmedidas».

Luis Caputo, con supermercadistas en el Ministerio de Economía.Luis Caputo, con supermercadistas en el Ministerio de Economía.
En el encuentro de más de 1 hora en el que participaron ejecutivos de Coto, La Anónima, Cencosud, Carrefour, Día y ChangoMas, afirmó que «bajar la inflación era la prioridad para poder estabilizar la economía, y así dar inicio a un ciclo de crecimiento que permita la baja de impuestos».

Adorni remarcó la decisión del Ejecutivo nacional de abrir «definitivamente» las importaicones» de determinados productos de la canasta familiar, con el objetivo de «hacer los precios más competitivos en beneficio de la familia y consumidores argentinos»

Además, señaló que esos productos importados tendrán «alguna quita de impuestos» «para ayudar a que la corrección de precios reconocidos por los empresarios» y así acelerar «la normalización en los precios».

Durante el encuentro del ministro Caputo con los CEOs de las principales cadenas se discutieron «alternativas para combatir la suba desmedida de precios y proteger de este modo a los consumidores».

El Gobierno busca mantener un intercambio «fluido» de información con las cadenas y que no convaliden subas excesivas.