El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, abrió hoy el período 151° de sesiones ordinarias de la Legislatura y en su discurso, en el que dejó entrever que buscará la reelección, hizo eje en «el derecho al futuro», el presente de la provincia y los logros de la gestión, puso de relieve las diferencias con la oposición y reclamó por los recursos de coparticipación que le corresponden al distrito más poblado del país.
Tras haber tenido que suspender el acto el pasado miércoles ante el apagón energético que afectó a millones de usuarios, el mandatario brindó su discurso ante la Asamblea Legislativa mientras afuera, en las inmediaciones de la Cámara de Diputados, lo acompañaron cientos de militantes.
«La de hoy es mi última apertura de sesiones, o en todo caso la última de esta primera etapa; será el tiempo pero sobre todo el pueblo de la provincia quien lo disponga», subrayó y luego planteó: «Elijo que todos quienes aspiran o aspiramos a gobernar esta provincia nos comprometamos con la defensa de sus intereses».
En su alocución, Kicillof describió la situación en que encontró la provincia al asumir y ponderó los avances en materia de educación, salud, seguridad, políticas sociales, viviendas y obras, impulso a la producción, recreación, turismo y cultura.
Además, repudió con énfasis el intento de magnicidio a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner al aseverar que «fue de una gravedad inédita». En paralelo, consideró que el hecho de que sea «perseguida y proscrita» es «preocupante e inadmisible».
En ese tono, el economista agradeció al presidente Alberto Fernández y a la vicepresidenta el «compromiso concreto» con el distrito a través de «recursos y obras», y destacó el respaldo del mandatario «al reclamo por el bochornoso fallo de la Corte Suprema sobre los recursos de nuestra provincia».
En ese sentido, analizó que «en la provincia falta buena parte de los recursos que produce y aporta al
sistema de coparticipación» y reclamó que la actual generación de dirigentes bonaerenses «recupere los recursos que le fueron arrancados a nuestra provincia».
Así, propuso a la Legislatura «trabajar entre todos por la recuperación de los recursos que le fueron quitados a las y los bonaerenses» e invitó a todas las bancadas «a formar una comisión destinada al reclamo permanente por los recursos de los bonaerenses y de los 135 municipios, gobierne quien gobierne».
«Como gobernador les pido a todas y todos quienes aspiren a gobernar esta provincia que se comprometan con este justo e histórico reclamo», dijo y opinó que «resulta escandaloso el fallo de la Corte que consagra privilegios, legaliza la injusticia y bloquea el derecho al desarrollo de los bonaerenses».
Sostuvo más tarde que el del máximo tribunal «es un fallo ilegal que le saca recursos a todas las provincias para dárselos a la ciudad más rica del país» y enfatizó: «No necesitamos que los medios de comunicación y los dirigentes políticos porteños sigan señalando todo lo que nos falta, lo que necesitamos es que nos devuelvan lo que nos quitaron a nosotros y al país federal».
Por otro lado, manifestó que «en la provincia la educación pública volvió a ser prioridad absoluta», puso de relieve el hecho de haber comenzado las clases a término y sin paros por cuarto año consecutivo, y rechazó que ese logro obedezca a vínculos personales o políticos.
«Nosotros respetamos los derechos de docentes y trabajadores de la educación, mostramos voluntad de diálogo, hacemos inversión y trabajamos en la transformación de los contenidos. En esta provincia los únicos privilegiados son los pibes y las pibas», recalcó Kicillof y apuntó: «Si en vez de cerrar escuelas rurales y de islas, se abren nuevas. Si en vez de estigmatizar a docentes o representantes gremiales, se los respeta y escucha, si en vez de reducir el presupuesto educativo, se lo incrementa, vamos a tener más y
mejores clases, no tengan dudas».
En ese contexto, pidió a la oposición «que en el Congreso apruebe la creación de las 4 universidades para nuestra provincia» y agregó: «En pandemia gritaban ‘abran las escuelas’. Hemos abierto las escuelas. Si realmente querían que abriéramos escuelas, deberían festejar que ya abrimos 150 nuevas en 3 años».
Posteriormente, advirtió que en un año electoral «la sociedad va a tener que elegir qué camino sigue», aseguró que «gobernar es defender, realizar y ampliar derechos, no privilegios», y dijo que «el dilema que plantea este año será entre la derecha y los derechos». «El peronismo siempre defendió el derecho al futuro para todos, no para pocos», apuntó.
Exhortó a los bloques de la oposición el tratamiento de leyes pendientes como la derogación de la reforma jubilatoria del Banco Provincia, que fue aprobada durante la gestión de María Eugenia Vidal y ratificó que seguirá «fortaleciendo el IOMA, la obra social» de los bonaerenses.
También dijo que seguirán «priorizando las inversiones en el sistema sanitario» y destacó que, en pandemia, «ningún bonaerense se quedó sin asistencia médica».
En el plano económico, precisó que, «el desempleo se ubica en 2019 en 11% y ahora está en 8%», aunque opinó que «ello es insuficiente». «Es necesario revisar las políticas redistributivas, falta que se recuperen los salarios y la redistribución», definió.
Celebró la temporada récord en turismo, destacó que se modificó el perfil del Banco Provincia ya que ahora destina sus recursos para el desarrollo productivo y ponderó que «se marcha hacia una estructura tributaria más progresiva».
Al referirse a la inversión en obra pública, dijo que «mejor que tuitear, es hacer», enumeró los trabajos hidráulicos, en materia de rutas, pavimentación, viviendas, cloacas y agua potable que lleva adelante su administración y recalcó que ello además genera empleo y actividad económica.
“Nadie dice que esté todo solucionado, pero ponemos los recursos donde tenemos que ponerlos, para mejorarle la vida a la gente tanto en el conurbano como en el interior, gobernados por nuestra fuerza política y la oposición”, expresó.
Luego, el gobernador aseguró que «se requiere un abordaje integral y multidisciplinario sobre la seguridad porque es uno de los problemas más graves de la provincia» y remarcó que «la experiencia del gobierno anterior demostró que no existe ninguna estrategia de comunicación que pueda reemplazar la falta de una verdadera política de seguridad».
Así, rememoró que «desde el primer día trabajamos con estrategias, métodos y evidencia científica para tener una mejor policía bonaerense», criticó que «muchos candidatos dan clase de seguridad en televisión, pero desfinanciaron a las fuerzas de seguridad».
Si bien nombró estadísticas de la Procuración que dan cuenta en una mejora en los indicadores criminales, como la tasa de homicidios, reconoció que ello «no alcanza» porque «cada crimen o robo es un hecho que debe evitarse».
«No corresponde hablar de éxitos sino de avances de un serio problema porque queda mucho por hacer», continuó el mandatario y aseveró que su administración puso en marcha «una inversión histórica para fortalecer a la policía».
Expuso que su gestión continuará «trabajando de manera seria y responsable para tener una provincia más segura y ordenada con una fuerza más preparada y humana» e indicó que como «los resultados no alcanzan, requieren de inversión permanente y capacitación».
«Queda muchísimo por hacer para proteger a la sociedad, pero lo haremos sin slogans vacíos, sino con trabajo serio y planificado. Me resulta inmoral hacer marketing o campañas aprovechando el miedo o el sufrimiento de nuestra sociedad», cerró.
En ese contexto, puso de relieve que se lleva adelante “el plan de infraestructura penitenciarias más grande de la historia de la provincia”, con la construcción de 12 mil nuevas plazas y contó que, para disminuir la tasa de reincidencia, además de impulsar la mejora en la educación en cárceles, se abrieron polos industriales para fomentar el empleo y la formación en oficios.
Finalmente, destacó los proyectos que “generarán riqueza en la provincia”, “integrarán de modo más adecuado las distintas áreas geográficas”, “mejorarán la distribución del ingreso”, “generarán muchísimos puestos de trabajo” y “asegurarán un futuro más próspero”: el Canal Magdalena; de la vía navegable troncal de los ríos Paraná y Paraguay; la explotación del petróleo off shore; el Gasoducto Néstor Kirchner; y el Plan de Integración provincial de autopistas, ferrocarriles y puertos bonaerenses.
De ese modo, Kicillof señaló que «el Estado provincial debe estar cerca para producir soluciones que mejoren la calidad de vida de los bonaerenses. Durante este año habrá elecciones y el pueblo volverá a decidir cómo quiere construir su destino. Por mi parte, me considero parte de este pueblo y, por lo tanto, también tengo el derecho y el deber de elegir».
«Elijo que durante la campaña podamos tener un debate político profundo, desprovisto de atajos y slogans vacíos, elijo que todos quienes aspiran o aspiramos a gobernar esta provincia nos comprometamos con la defensa de sus intereses, elijo condenar la violencia y el odio, elijo la democracia plena y sin proscripciones, elijo, que sigamos trabajando por un destino colectivo, por una provincia integrada, con más igualdad de oportunidades, con más justicia social», indicó.
Por último, afirmó que «en la provincia de Buenos Aires, y en toda nuestra Argentina, aún hay muchas necesidades por resolver en una sociedad fragmentada por intolerables desigualdades» e invitó a los legisladores a «seguir avanzando derecho al futuro».
Participaron senadores y diputados provinciales; el gabinete bonaerense; intendentes; representantes gremiales, de asociaciones agrarias e industriales; la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Victoria Tolosa Paz; la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto; y el dirigente gremial Hugo Moyano.
También formaron parte la presidenta de la Suprema Corte, Hila Kogan; el procurador del Tesoro, Carlos Zanini; la senadora Juliana Di Tullio; los diputados nacionales Daniel Gollan, Hugo Yasky, Facundo Manes y Diego Santilli; la presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis; el Fiscal general bonaerense, Hernán Gómez.