El presidente de la comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, José Luis Espert, aseguró hoy que el cepo cambiario «se va a ir eliminando, como se está eliminando todos los días, de manera gradual, a medida que Argentina crezca, la demanda de dinero crezca y la inflación vaya bajando», y no descartó «que se pueda terminar rápido como consecuencia de un acuerdo con el Fondo Monetario».
Espert de esta manera hizo referencia a las afirmaciones del presidente Javier Milei, quien, en un discurso ante empresarios en la Bolsa de Nueva York, dijo que su Gobierno «no» está dispuesto «bajo ningún punto de vista a negociar el equilibrio fiscal», prometió «domar la inflación» y sostuvo que el cepo será liberado cuando «la tasa de inflación sea cero».
«En los hechos esto significa que el cepo se va a ir eliminando, como se está eliminando todos los días con una regulación menos, de manera gradual, a medida que la Argentina crezca, la demanda de dinero crezca y la inflación vaya bajando o se puede terminar rápido lo poco que queda del cepo, si recibimos algún un dinero fresco, por ejemplo, como consecuencia de un acuerdo con el Fondo Monetario, aunque no digo que sea la única manera», aseguró Espert en declaraciones formuladas esta mañana a radio Rivadavia.
Por otro lado y ante una consulta sobre la situación que atravesó el dirigente Juan Grabois en el aeropuerto de Ezeiza, cuando un grupo de personas lo increpó a su llegada de Roma, Espert afirmó: «Rechazo los escraches, no me gustan, independientemente de que sea un delincuente como Grabois o no. Es un delincuente que debería estar preso porque violó la Constitución y el Código Penal cortando calles y eso está penado. Lamento que no esté preso por eso; el escrache, no».
Sobre dichos del papa Francisco, el diputado nacional lamentó «que el Papa reciba delincuentes como Grabois o mafiosos como (Pablo) Moyano y critique de manera tan severa a un gobierno como el de Milei, que está encaminando las cosas después del incendio que hizo de la Argentina el kirchnerismo, sobre el cual rara vez lo criticó».
En ese marco, agregó: «No tengo dudas (que está jugando políticamente). Si guardó silencio mientras gobernaba un impresentable como Alberto Fernández haciendo una cuarentena asesina, donde murió mucha gente que no fue testeada, no hay duda que está jugando políticamente».
Además, interpretó que el Papa busca «ser el gran factor de unión del peronismo» y lo definió como «un gran cultor del pobrismo» que «se siente cómodo con una Argentina como la que tenemos, que logró el kirchnerismo que tanto apañó».