El hospital provincial Lucio Meléndez de Adrogué, en el municipio de Almirante Brown, instaló cámaras térmicas que le toman la temperatura al personal de salud, a los trabajadores y a los pacientes allí internados para prevenir la propagación de Covid-19.
Se trata de un hospital de 114 años de antiguedad en el que trabajan 860 personas y cuenta con 202 camas que está ubicado en la calle Presidente Juan Domingo Perón 859.
El intendente Mariano Cascallares precisó que esa tecnología -que permite ver por pantalla la temperatura de las personas- «sólo funciona en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, por lo que el Lucio Meléndez es el primer hospital público del país en incorporarla».
«Estamos haciendo grandes esfuerzos para vacunar y cuidar a nuestros adultos mayores, para profundizar los controles viales y de precios, y para seguir articulando con el Ministerio de Salud para avanzar con acciones como esta para cuidar a todo el personal sanitario», dijo.
La Cámara Térmica Dahua fue instalada en comodato por la empresa de tecnología informática C-Team Global en el acceso al nosocomio por el cual se comunica la guardia de maternidad, obstetricia, neonatología, pediatría, maternidad y sala de terapia intensiva pediátrica.
«La empresa nos presta la cámara ante esta contingencia en el marco del programa ‘Causa Común Brown’, que articula un espacio solidario en el que intervienen ONG, profesionales, empresarios, comerciantes, pymes, universidades, instituciones, vecinos y estudiantes para abordar la pandemia», contó Hilda Granoti, la directora ejecutiva del Hospital.
Sostuvo que cuando las personas ingresan al centro de salud «la cámara, que está en el techo, mide la temperatura, lo que se refleja en un monitor» y detalló que si alguien tiene más de 37° «suena una chicharra y se pone colorada la pantalla».
«En esos casos, se aparta a la persona, se le coloca un barbijo, luego se la aísla y se activa el protocolo», apuntó la médica.
Remarcó Granoti que el dispositivo electrónico otorga seguridad no sólo al personal que ingresa a trabajar sino también para los pacientes internados.
Manifestó que «por ejemplo ahora tenemos a 36 mamás internadas, a quienes sus maridos vienen a visitar desde la calle y pueden estar infectados» y graficó que al área de pediatría y neonatología «vienen de afuera los padres a ver a sus hijos, por eso tenemos que tener controles».
Desde el municipio detallaron que otra de las ventajas de este sistema es que no requiere un contacto físico entre las personas y el personal medico.
«A diferencia de los termómetros comunes, con estas cámaras no es necesario acercarse para medir la temperatura, sino que se monitorea a distancia», explicó Cascallares y concluyó: «Se trata de una herramienta preventiva que da una primera medición precisa y asertiva».