El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, inauguró hoy un polo universitario en el municipio de Marcos Paz, donde aseveró que su administración hace “un escudo y una defensa ante tanta agresión a una provincia de trabajadores, humildes y sacrificados” por parte del gobierno nacional.
El mandatario además inauguró el quincho municipal en el barrio Obrero, destinado a personas mayores; entregó un camión caja abierta para la recolección diferenciada de residuos sólidos urbanos y computadoras del programa “Conectar Igualdad Bonaerense” a escuelas del distrito.
“Hay cosas que el mercado no va a resolver, para eso hay que tener un Estado presente, que dé respuestas, dignidad, salud, educación e infraestructura”, dijo en su discurso.
Luego, el economista rememoró que el presidente Javier Milei “decía que la motosierra tenía un destinatario: la casta” y planteó que, en la actualidad, “todas estas cuestiones ridículas que planteó en campaña se están cayendo en la cabeza de la sociedad argentina”.
“No es verdad que venía a mejorar los salarios, los vino a destruir. Vino a abandonar las responsabilidades del Estado”, analizó y expuso que los votantes de Milei fueron “estafados”, dado que “les prometieron algo y está pasando lo contrario”.
Sostuvo que “el ajuste está en el supermercado, en la farmacia, en la cuenta de luz, en la estación de servicio, fue para el pueblo, mientras un puñado se está llenando de guita con los negocios que le da Milei”.
En ese sentido, destacó que “hay cosas que el mercado no hace, no lo hace no porque sea malvado sino porque no es negocio” y apuntó: “En la Provincia instalar universidades privadas en pequeños pueblos no está prohibido; pero donde no hay negocio, no hay inversión privada”.
“No podemos darnos el gusto como sociedad de dejar afuera a millones de personas en la salud, la educación y la universidad solo porque no es negocio y no da ganancia. Sería un país mucho más desigual y con menos futuro”, reflexionó Kicillof y se mostró orgulloso de la creación del polo universitario.
“Instalar centros universitarios en cada uno de los distritos, les abre la posibilidad a miles de pibes. Les quieren vender a los bonaerenses y argentinos recetas mágicas que no existen y son estafas. Nuestra respuesta tiene que ser la que damos hoy: más que decir, hay que hacer”, planteó el gobernador en su alocución.
“Estamos poniendo los recursos y el empeño. Son momentos difíciles: aumenta la demanda de alimentos, se pierden trabajos y cierran empresas. Estas tareas que damos en cada uno de los municipios tienen que ver con hacer un escudo y defensa ante tanta agresión a una provincia de trabajadores, humildes y sacrificados, que no necesita clases de economía para saber que hay que laburar mucho y fuerte”, resaltó.
De ese modo, concluyó: “Cuenten con nosotros, no aflojen. Hay que hablar con todos y hacer algo más fuerte y poderoso: mostrar lo que estamos haciendo y podemos hacer”.