Las provincias dejaron de percibir en la primera quincena de marzo unos $ 21.600 millones por día en el resultado consolidado, debido a la caída en términos reales de las transferencias automáticas y no automáticas, llegándose a los casos extremos de siete distritos con recortes interanuales de más del 99% en recursos discrecionales.
Los datos surgen del último informe de la consultora Politikon Chaco, en base a informes oficiales del Ministerio de Economía, que en esta oportunidad dejaron en evidencia no solo el torniquete aplicado en las transferencias discrecionales (que por su naturaleza son más proclives al ajuste) sino principalmente en las automáticas (principalmente Coparticipación Federal) debido al efecto de la caída de la actividad económica en la recaudación.
En un adelanto del informe mensual definitivo, Politikon Chaco comparó las transferencias nacionales a los 24 distritos en la primera quincena de marzo, aprovechando que tanto en 2023 como en 2024 en ese período hubo 11 días hábiles.
En el total de transferencias, las provincia y CABA percibieron de parte del Estado nacional $898.142 millones, un 183,1% más que en la primera mitad de marzo de 2023, pero, al ser un incremento nominal inferior a la inflación proyectada, se tradujo en una merma del 29,1% a valores constantes.
Sin embargo, la variación dista de ser homogénea, tanto en su clasificación por tipo de transferencia como por su distribución geográfica.
En el primer caso, el 29,1% de caída real total se compuso de una retracción del 24,4% en las transferencias automáticas (Coparticipación, compensaciones por el Consenso fiscal y leyes especiales) y del 69,5% en las no automáticas o discrecionales (Fondo Nacional de Incentivo Docente y otros programas).
Esos porcentajes no alcanzan para dimensionar el impacto del ajuste, debido a la disparidad en los montos: la caída del 24,4% en las transferencias automáticas representan una suma cercana a los $ 210.000 millones que el conjunto de los 24 distritos habría percibido en caso de no haber un descenso en términos reales, mucho más que los $ 28.000 millones de pérdida que implicó la baja del 69,5% en las transferencias discrecionales.
Esos $ 238.000 millones que se dejaron de percibir por el recorte real de las transferencias equivalen a un poco más de $ 21.600 millones por día, aunque con impactos diferentes tanto por la disparidad en los recortes como por el peso que tienen los Recursos de Origen Nacional (RON) en cada jurisdicción.
Por ejemplo, la Ciudad de Buenos Aires fue el único distrito que mostró una mejora en las transferencias recibidas (333,9% nominal y 8,7% real) debido a “haber captado un importante flujo de fondos para el funcionamiento del Hospital Garrahan”, rezagados de enero y febrero, según consignó la consultora.
Las provincias más afectadas
Las provincias que acusaron los mayores recortes porcentuales reales fueron La Rioja (-39,1%), Neuquén (40,3%) y Chaco (-42,1%).
Pero, en materia de transferencias no automáticas, hubo catorce casos con retracciones de más del 90% y, dentro de ese grupo, siete con bajas de más del 99%.
Las provincias más afectadas en los recortes de las transferencias discrecionales fueron Chaco (-90,1%), Formosa (-90,9%), Mendoza (-91%), Tierra del Fuego (-94,6%), La Pampa (-96,5%), Jujuy (-97,4%), San Juan (-98,4%) y, entre las que tuvieron caídas de más del 99%, Entre Ríos (-99,3%), Córdoba (-99,4%), San Luis (-99,5%), La Rioja (-99,6%), Misiones (-99,7%) Catamarca y Neuquén (-99,8% en ambos casos).