El presidente Javier Milei prepara por estas horas la exposición del Presupuesto 2025, que
brindará con detalles el próximo lunes 16 de septiembre en el Congreso Nacional.

Por primera vez un jefe de Estado concurrirá al Parlamento para defender el cálculo de ingresos y gastos de su gestión, tarea que en general realiza el ministro de Economía de turno, siendo
relevado en las sucesivas audiencias por sus principales secretarios, y funcionarios de otras dependencias económicas clave como AFIP.

La primera jornada solía desarrollarse en la Sala Delia Parodi de la Cámara de Diputados, con la presencia del jefe del Palacio de Hacienda, en el marco de una reunión informativa de la comisión de Presupuesto y Hacienda.

A este encuentro solamente asistían los integrantes de la comisión y algunos referentes más de cada uno de los bloques, sumado a un puñado de representantes de la Cámara alta.

La irrupción de Milei en la escena exige un cambio en los términos de logística y operativo de seguridad, ya que la investidura presidencial obliga a darle otra espesura a la
organización.

Según pudo saber la Agencia Noticias Argentinas de altas fuentes parlamentarias del oficialismo, la versión más fuerte por estas horas es que el recinto de la Cámara de Diputados podría constituirse en la comisión de Presupuesto (como sucedió durante la pandemia de coronavirus).

Es decir, utilizar el auditorio más grande de todo el Congreso para albergar al presidente, y a todos los diputados, senadores y autoridades del Poder Ejecutivo que sean habilitadas a asistir.

Semejante despliegue conllevaría un operativo de seguridad mucho más riguroso que de costumbre, similar al de una Asamblea Legislativa.

Esta última alternativa, la de convocar a una Asamblea Legislativa como las que se producen cada 1 de marzo para la inauguración de las sesiones ordinarias, o en cada asunción
presidencial, fue parte de las especulaciones cuando se conoció la voluntad de Milei de encabezar la presentación del Presupuesto.

Sin embargo, tal cosa no sería necesaria y bastaría con mudar la sede de la comisión de Presupuesto al recinto.

El discurso de Milei durará el tiempo que necesite para explayarse, ya que no hay límite en ese sentido, y finalizada esa tarea podrá retirarse sin necesidad de responder las inquietudes
de los legisladores presentes.

Será en consecuencia un monólogo del presidente, y no habrá intercambio con quienes tendrán luego el deber de analizar el proyecto y aprobarlo (o rechazarlo).

De acuerdo a una versión a la que Noticias Argentinas tuvo acceso de altas fuentes parlamentarias, el ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, no se sentía del todo seguro para someterse al escrutinio punzante de la oposición, que lo esperaría con la dentadura afilada.

La presentación de Milei ocurrirá en medio de la polémica por el veto a la ley opositora de movilidad previsional y la represión a los jubilados en las adyacencias al Congreso.

Se producirá además después de la sesión especial pedida por la UCR, Encuentro Federal y la Coalición Cívica para insistir en dicha ley, aunque para ello deberá reunir las dos terceras partes
de los votos, una meta indudablemente complicada.

El jefe de Estado confirmó este jueves que presentará el Presupuesto 2025 en el Congreso durante su exposición en el marco del III Encuentro Regional de Foro de Madrid – Río de la Plata 2024 que se llevó a cabo en el Palacio Libertad (el ex Centro Cultural Kirchner).

«Estaré yendo al Congreso de la Nación a exponer las bases del déficit cero para terminar de una vez por todas con este cáncer que es el déficit fiscal, las crisis fiscales y el desastre macroeconómico que ha hundido a la Argentina en la pobreza», sostuvo el mandatario después del discurso del líder de VOX, Santiago Abascal.

En la cumbre de ultraderecha, Milei anticipó que la oposición rechazará en el recinto el Presupuesto del Poder Ejecutivo, porque según dijo afecta sus intereses » de casta».

«Desde acá se les ven los colmillos. Y ahora, cuando discutimos el presupuesto, va a pasar lo mismo. Ellos van a hacer lo imposible para que el presupuesto no salga. ¿Por qué? Porque un
presupuesto liberal y austero significa el fin de miles de curros, y como son el partido del Estado, necesitan mantener vivo el modelo del Estado presente, porque es lo que les da de comer»,
sostuvo.