El gobierno bonaerense reglamentó hoy la ley que declara la emergencia sanitaria en los geriátricos de gestión pública y privada ubicados en la provincia de Buenos Aires como consecuencia de la pandemia de coronavirus.
La iniciativa, publicada hoy en el Boletín Oficial del distrito, había sido enviada por el gobernador Axel Kicillof y fue aprobada por la Legislatura bonaerense el 25 de mayo pasado.
La ley crea el Registro Complementario de Establecimientos Geriátricos de Gestión Pública y Privada y establece la cantidad de médicos, cocineros, enfermeros, personal de limpieza que podrán tener las residencias de baja y alta complejidad para personas mayores, hogares para personas mayores
La norma establece que se deberá iniciar “un proceso de empadronamiento, relevamiento y fiscalización complementario de los establecimientos regularizando de forma progresiva todos aquellos que no cuenten con habilitación vigente”.
Asimismo, mientras dure el proceso, el Ministerio de Salud bonaerense podrá permitir “el funcionamiento excepcional, precario y transitorio por un plazo que en ningún caso podrá superar el de la emergencia social, económica, productiva, y energética” aprobada en diciembre y prorrogada hoy por la Legislatura.
Además, el Ministerio de Salud “determinará el procedimiento a seguir para los casos en que el establecimiento no cumpla las condiciones mínimas de permanencia y deba procederse a su clausura definitiva, disponiendo, junto con los Municipios, el traslado de los adultos mayores a otros establecimientos o residencias”.
La ley determina que las inspecciones a los establecimientos geriátricos serán realizadas por la Dirección de Fiscalización Sanitaria y aclara que cada municipio «podrá realizar inspecciones en los establecimientos geriátricos ubicados en el ámbito de su jurisdicción».
«Los inspectores/as municipales deberán labrar, en todos los casos, un Acta de Inspección que deberá ser remitida a la Dirección de Fiscalización Sanitaria para su consideración», se añade.
También crea el “Programa Geriátricos de la provincia de Buenos Aires”, con el propósito de promover el fortalecimiento y desarrollo de esos establecimientos, tanto públicos como privados.
Contempla además la posibilidad de otorgar subsidios para el fortalecimiento y desarrollo de los establecimientos geriátricos de la provincia.