El ministro de Hábitat y Desarrollo Urbano, Agustín Simone, encabezó la apertura de sobres para la construcción de 300 casas, equipamiento e infraestructura en el barrio Kennedy de Berazategui, y aseveró que “hay un compromiso absoluto del gobernador Axel Kicillof con la construcción de viviendas”.
En un comunicado, se detalló que el proyecto, con presupuesto de más de $2.776 millones, incluye la infraestructura del complejo, con la realización de redes de gas, agua potable, cloacas, desagües pluviales, obras viales, alumbrado público, red de media y baja tensión y una planta de tratamiento cloacal.
Además, se llevarán a cabo veredas, cercos perimetrales y la forestación del predio.
Se preció que la obra «quedó paralizada en la gestión de María Eugenia Vidal cuando faltaba menos del 10% para ser terminada» por lo que se generaron «distintos grados de deterioro en las casas».
En consecuencia, para volver a poner en marcha la obra, se debió realizar un informe técnico en el que se determinó la necesidad de la demolición parcial o total de las viviendas.
Durante el evento, el ministro Agustín Simone destacó el trabajo conjunto con el municipio para terminar los trabajos y recalcó: “Estas 300 viviendas que estaban casi terminadas y quedaron abandonadas son muestra del desinterés por el futuro de los vecinos y las vecinas”.
“Además de las familias beneficiarias de las viviendas, estos proyectos generan una gran cantidad de puestos de trabajo que impactan en la economía local”, dijo.
En tanto, el intendente de Berazategui, Juan José Mussi, remarcó que se trata de «una obra muy trascendente porque las casas van a ser habitadas por familias que actualmente viven en condiciones de vulnerabilidad cerca de un arroyo”.
Así, recordó el abandono que sufrió la obra durante la anterior gestión: “No se hizo absolutamente nada, las casas se abandonaron, incluso se sacó la custodia y eso generó vandalismo y destrucción”, indicó.